Wu Chian Li (*)


Según un especialista chino en manejo de energías humanas, un posible ataque energético seria con alta probabilidad el causante de desequilibrios en la armonía del cuerpo del presidente Hugo Chávez.


De acuerdo al especialista oriental, algunos de los 3000 puntos energéticos descriptos por la medicina china habrían sido sometidos a algún tipo de manipulación ocasionando un desequilibrio energético severo.


Las energías humanas pueden clasificarse básicamente en Energía ancestral y Energía adquirida.


La energía ancestral es, en términos actuales, el denominado código genético, aportado por la unión del espermatozoide con el óvulo. Esta energía es recibida por las personas en el momento de la concepción, constituyendo un legado energético.


Es la herencia genética, cromosómica, y va a ser la responsable de todos los cambios bioenergéticos y bioquímicos del organismo a lo largo de la formación del feto, y posteriormente (con la unión de otras energías), de todas las modificaciones físicas (biológicas) propias del desarrollo humano.


Esta energía muestra también las predisposiciones físicas, psíquicas. La energía ancestral se va desgastando en ciclos periódicos, hasta la muerte. Para salvaguardar y completar la energía ancestral, se obtienen del medio las llamadas energías adquiridas, responsables del correcto funcionamiento de la fisiología del cuerpo.

 


La energía adquirida, según su función en el cuerpo se denomina Nutricional y Defensiva:


Nutricional: que se forma por la combinación de la alimentación y de la respiración. De ahí la importancia que la medicina china da a la respiración, que incluso dentro de las posibilidades terapeúticas existe un sistema basado en ejercicios respiratorios, el Qi-gong (chi-kung). También en sus escritos manifiestan que el estómago es la «fábrica de la salud». Esta energía es la que circula por la Vías Principales, a partir del pulmón, siguiendo un ciclo perfectamente definido que alimenta energéticamente a todos los sistemas del organismo.


Defensiva: la cual tiene la misión de proteger al organismo, y por ello se manifiesta siempre hacia el exterior del cuerpo, preservándolo de las energías perversas.

Estas energías perversas son las que causan el daño corporal (en términos occidentales somatización de ataques psíquicos) y que de acuerdo al médico ancestral Wu Li afectan especialmente a líderes mundiales sometidos a grandes presiones.


El maestro chino Wu afirma en sus escritos que estos desequilibrios son en ocasiones causantes de males en la mencionada “fábrica de salud”, localizada en la cavidad abdominal y que intervenida a tiempo, restablece sus niveles energético óptimos para la prosecución de una vida normal.


Un “golpe energético” es altamente probable haya sucedido en el caso del presidente Hugo Chávez, quien no ha estado excento de ataques energéticos que atravesaron sus anillos de seguridad no entrenados en estas antiguas prácticas orientales adoptadas por servicios de países occidentales, ni están preparados para esta nueva guerra, de V Generación o guerra de las nano-energías.


(*) Dr.  Estudios Orientales y Medicina Ancestral China

 

wuchian@hotmail.com