José Justiniano Lijerón (*)

A seis meses y días del presente año hay relativa calma en el país, el gobierno del Estado Plurinacional después de haber sorteado algunos conflictos y otros postergados al comenzar el presente año,  como consecuencia del arrastre de la inflación de algunos artículos de primera necesidad al finalizar el año pasado, y que se desató especialmente con la especulación por parte de la empresa privada y sus brazos operativos los comerciantes medianos y pequeños. Para muestra sólo un ejemplo, el azúcar cuyo precio antes de ser escondido era  de 4 bolivianos el kilo,  pese a los vanos esfuerzos del gobierno por contrarrestar importando el artículo, los especuladores lograron subir dicho producto esencial hasta 11 y 12 bolivianos por kilo, al presente, el azúcar cuesta al público siete bolivianos, y eso que estamos en plena zafra. La empresa privada tiene esa capacidad, sin paros ni huelgas, sólo usando sus mecanismos de ocultamiento y campañas por sus medios de comunicación, hasta logran a veces responsabilizar al gobierno por sus propias fechorías y de esta manera seguir engrosando sus arcas con las necesidades del pueblo. 

De poco y nada sirvieron las protestas populares por la subida de varios artículos, previendo el aumento que luego otorgó el gobierno, y que provocó el rechazo de los trabajadores sosteniendo un conflicto de paros, marchas y huelgas que duró más de dos semanas y que merced a un convenio con la dirigencia actual de la Central Obrera Boliviana, que había sido tildada de “servir intereses de la derecha” por un sector dominante del gobierno y también  cuestionada por las bases, dicho acuerdo fue adornado con algunas promesas  de mejoras y medidas que aún están pendientes.

La dirigencia cobista en los hechos ha demostrado que no tiene la capacidad,  ni la representatividad, de los trabajadores bolivianos y sus organizaciones de base, ya que una de ellas la más importante, la Federación Sindical de Trabajadores Mineros, después de dichos conflictos que en vez de ser una victoria económica y política para los trabajadores, fue una decepción, cuestionó la decisión que logró la cúpula  de la COB en un ampliado, de postergar por un año más su mandato, logrando que se convoque un nuevo ampliado nacional, este 19 de los corrientes, donde se revisará o se ratificará, el hecho importante de realizar el Congreso Nacional de trabajadores o esperar a mayo del próximo año, con el objetivo de cambiar su Comité Ejecutivo ante los desafíos que impone el presente de lucha, para no permitir el desvío latente del proceso que ha costado  años de luchas a los trabajadores, campesinos y aliados de la clase obrera.

Este hecho futuro sobre los burócratas de la máxima organización laboral del país, será una pauta muy importante para poder ver los pasos que tendrá que seguir el movimiento obrero organizado ante la política del gobierno, que  hace poco caso de esta dirigencia, aprovechándose actualmente de la incoherencia , la incapacidad y su falta de ser un interlocutor válido de las bases, el gobierno  logra a veces  ponerla inclusive en contra de sus bases, no para beneficio del gobierno, sino para la propia derecha, que ve con beneplácito que quienes dicen ser gobierno de los trabajadores y campesinos, tratan en los hechos de hacer buena letra para los empresarios “amigos del proceso”, y  arremete en contra de la organización laboral (la COB), que es la que siempre ha salido al frente a derrotar dictaduras, gobiernos neoliberales y será la quien saldrá a defender este proceso que es de todos los trabajadores y campesinos de la ciudad, las minas y el campo.

Salvo algunos despistados de la derecha, especialmente los que ladran obedeciendo órdenes, la esencia de la burguesía nacional y sus referentes están bien gracias, sumamente quieta porque está haciendo lo que le conviene y sabe hacer, firman acuerdos de “contratos de servicios” de exploración petrolera, construcción de importantes  carreteras, con precios que pasan los 300 millones de dólares , alianzas con algunos sectores burgueses en formación, emergentes y hasta tradicionales, importan lo que quieren y venden al precio que quieren, con un plus de contrabando, es casi seguro que siguen evadiendo impuestos al fisco, así como sus aportes a las cajas de seguro y sobre eso, siguen gozando del subsidio a los hidrocarburos especialmente los agroindustriales. Además en son de afirmar su respeto a la “seguridad jurídica”, el gobierno les consolida sus títulos propietarios para que puedan, vender, sacar créditos etc. a casi un millón de hectáreas de terrenos cultivables, les promete otorgar créditos con tasas bajas  menor del 6 % a empresarios agroindustriales con el objeto de garantizar la “producción de alimentos”.

Cada que puede, el gobierno ratifica y jura que respetará siempre la propiedad privada, se los invita a ser parte de los planes del gobierno. Que más podría pedir la empresa privada. El argumento esgrimido siempre es que la propiedad privada genera empleo, pero en honor a la verdad, lo que mas genera es desempleo y miseria.

La banca privada y entidades financieras siguen siendo intermediarios de los dineros del gobierno y del pueblo, son los principales beneficiarios  del gran negocio de la compra de bonos emitidos por el gobierno, a intereses más altos que los que el gobierno, recibe por sus intereses de las reservas nacionales. Lo que ocasiona  disimulada e interesadamente que por esta vía de típica medida neoliberal, se vaya desangrando la economía del país, beneficiando siempre a los grupos de poder, nuevos y viejos, y por supuesto sus cómplices.

Siguen habiendo deficiencias y demoras por carencias ideológicas y prácticas del gobierno, en la conformación y fomento a empresas del pueblo, para ir equilibrando de alguna manera la propiedad de los medios de producción en manos de unos pocos, como el alma de la explotación y saqueo del trabajo de los demás y la principal causa del virus maligno de la desigualdad.

Otra pésima señal para el pueblo y para la seriedad del gobierno de una mala gestión, ha sido el reciente conflicto con los propietarios de medios de transporte, que rechazaron un decreto de prohibición de la circulación por razones de seguridad pública de vehículos para el transporte, con una antigüedad de más de 12 años de uso, lo que ocasionó la furia de los propietarios con amenazas de paros y huelgas, y el Presidente Evo “escuchando a los propietarios del transporte”, revocó dicha medida para beneplácito de los empresarios del transporte.

La pausa de los conflictos del semestre acumulados y del año anterior en lo que respecta a las deudas  a los sectores sociales, se amortiguó además con el problema justo de la reivindicación marítima, cuando el gobierno se dio cuenta al denunciar al país y al mundo, la posición de los gobiernos  chilenos, que lo único que hicieron hasta el presente fue dilatar  y hacernos ilusionar de que conversando como “pueblos hermanos”, conseguiremos volver a nuestras costas marítima. Desde que tengo uso de razón este problema de dignidad nacional, siempre fue utilizado por los gobiernos de turno, como un saludo a la bandera para remover el sentimiento nacional, sin encararlo claro y objetivamente y nada más. Otro hecho, no parecido al anterior, pero igualmente usado para remover el sentimiento nacional ha sido la Copa América de Futbol, adonde fuimos de primero  y retornamos de primero eliminados, otra frustración, pero nos queda el consuelo de que “jugamos como nunca, pero perdimos como siempre”.

La Asamblea Legislativa Plurinacional, donde el gobierno gracias a nuestros votos mayoritarios, tiene más de dos tercios de asambleístas, continúa aprobando leyes buscando siempre el de no afectar los grandes intereses de los grupos de poder, así por ejemplo saldrá una nueva ley de las Comunicaciones para la distribución de frecuencias de radiodifusión y de televisión de “manera equitativa”, en la que el gobierno asegura que en esta ley “serán respetadas absolutamente” las licencias vigentes y en funcionamiento, eso se “respeta y se mantiene”. Claro otra parte se dará a los otros sectores del país, pero la Empresa privada tiene su parte asegurada y con eso le sobra y le basta, para seguir desinformando y desestabilizando, mintiendo y engañando, cuando le conviene a sus intereses económicos y políticos.

Estamos en las vísperas de una nueva elección en el mes de octubre venidero, cumpliendo lo estipulado por la Constitución Política del Estado Plurinacional se deben elegir con el voto popular, los Tribunales Supremo de Justicia, Constitucional y Ambiental y el Consejo de la Magistratura, Los Asambleístas del Estado, conforme a ley elegirán por dos tercios de los votos, a 125 de candidatos de las más de cinco centenas de postulantes, para que el pueblo elija en las urnas solamente a 56 personas  y de acuerdo a lo establecido respetando la equidad de género, así como la inclusión de candidatos  de origen campesino indígenas y originarios, que  deben de conformar dichos tribunales de justicia. Al respecto habrá aún mucha tela que cortar, la oposición desubicada que se opone a todo lo que hace y no hace el gobierno, dice que boicoteará dicha elección, hay sectores que también dicen que votarán en blanco, porque aducen que la podredumbre de nuestra justicia no es problema de personas sino de una estructura podrida, hecha a semejanza de las clases dominantes y mientras no haya la capacidad y voluntad política de cambiar aquello, es decir, códigos, procedimientos, normas, etc. la cosa seguirá lo mismo. Sin embargo habrá que ver en la práctica este nuevo invento del Estado Plurinacional.

Ojala que en el afán de asistir a elecciones no se le ocurra a alguien del gobierno, instaurar la elección por el voto popular, para elegir a los jugadores de la selección nacional, que asistirán a las eliminatorias del próximo campeonato mundial de futbol en Brasil el año 2014, me negaré a votar.

Para seguir con las malas señales, el funcionario Valenzuela del Departamento de Estado de los EE.UU, anuncia que muy pronto se restablecerán las relaciones con Bolivia, después de la expulsión del embajador Goldberg el año 2008, además de la DEA y algunos de sus agentes, él dice que hay aun profundas diferencias respecto al comercio, narcotráfico y a la cooperación.

Sin embargo el hecho de que aquí no haya embajador alguno de los EE.UU. no impide la intromisión en los asuntos del país como lo hace en todas los lugares, a través de sus agentes que tiene incrustado en diferentes instituciones, así como sus ONG, financiadas por USAID (que no ha podido ser expulsada del país pese a las serias denuncias inclusive de un Diputado del Partido de Gobierno) y que triangula sus aportes a través de una serie de “fundaciones” europeas que trabajan con y para el gobierno, hoy metidas especialmente en la cuestión de las elecciones de magistrados, y a desestabilizar y dividir organizaciones sindicales, incrustándoles el veneno del egoísmo, de la libre empresa, la libertad de expresión como la panacea para la solución  de los problemas personales, en desmedro del interés colectivo de las mayorías.

Ante todo este panorama, no tan agradable para quienes apoyamos un gobierno que está ahí por voluntad popular, para beneficiar fundamentalmente a los trabajadores, campesinos y desposeídos de este país, con políticas económicas y políticas que a la par de dar satisfacciones materiales, de la certeza de avanzar en la construcción de un nuevo sistema económico y político que descanse en la propiedad de todos los grandes medios de producción en manos del todo el pueblo. Y que no se olvide de cumplir leyes que tienen que ver con la reversión de tierras ociosas en manos de terratenientes. Que cuando se le ocurra dar incrementos salariales, tenga en cuenta que sin un control previo de precios de la canasta familiar, para evitar la especulación, todo aumento es un fraude, pues la empresa privada y sus mecanismos de especulación, trasladan dicho aumento y aun más a los artículos especialmente de primera necesidad, lo que hace restar el poder adquisitivo del pueblo, esto no es nada nuevo, lo sabe todo el mundo.

Los trabajadores y el pueblo, siguen esperando mejores condiciones de vida, mejores salarios, empleos, mejor educación, mejor salud y sobre todo políticas claras y definidas sobre el rumbo político a seguir, o vamos hacia la construcción de una nueva sociedad de iguales, libres, independientes y donde el pueblo sea gobierno efectivo, o este gobierno será una mala copia de cualquier gobierno neoliberal.

Los pueblos son pacientes y saben esperar pero no indefinidamente, los conflictos postergados tampoco, y estas próximas elecciones de octubre, darán la tónica para palpar si es que Evo Morales sigue gozando del apoyo que cree seguir teniendo. Es bueno recordarle que gobiernos que han pretendido gobernar por encima de las clases, terminaron siendo repudiado por todos, eso no debe ocurrirle a este proceso, está en las manos del Gobierno  definir posiciones al respecto, o se gobierna para satisfacer a la empresa privada explotadora y especulativa y a propietarios en general, o se gobierna con coraje para beneficio de los trabajadores, campesinos y para todo el pueblo, no se ha podido inventar todavía y no creo que se pueda, satisfacer al pueblo y al mismo tiempo a los responsables de la miseria de los pueblos, el sistema capitalista.

Otra, es una grosería del gobierno que hasta hoy día no tenga la capacidad ni el interés de reconocer y resarcir los daños ocasionados a las miles de víctimas de las dictaduras, presos, exiliados, inválidos, muertos y en un afán dilatorio, pone a incapaces como jueces para determinar quien es víctima y quien no, y que ni siquiera conocen la historia reciente de nuestro país. Es una vergüenza. Señor Presidente, nosotros le reconocimos su luchas recientes, al defender a su sector y luchar en contra del neoliberalismo nombrándolo, Presidente Constitucional de la Republica. Es su obligación hacer algo por estos luchadores y sus familiares en contra de las dictaduras, así como completar las promesas a las víctimas de octubre  cuando la guerra del gas en la ciudad del Alto.

Recientemente en el municipio de Mocomoco en el Departamento de la ciudad de La Paz, en un acto público por tv escuché decir al Presidente Evo de que a veces se pregunta “que está haciendo aquí”, cuando contaba una de sus anécdotas preferidas, de que antes, no tenía para comprarse camisa y qué para asistir a un ampliado campesino, los compañeros le compraron una  que costó 2 bolivianos, y agregaba ufano que “ahora maneja millones del Estado y la Cooperación”, ¡cuidado Presidente! que le esté quedando grande el estar a la cabeza de este proceso, cuando tenga algunas dudas, recurra a la clase obrera organizada y sus afiliados, como su mejor garantía de no equivocar el camino de la liberación nacional.

josejustinianol@hotmail.com

(*)  ex Dirigente de la Central Obrera Boliviana (COB)