El candidato a legislador por el kirchnerismo militó toda su vida en los barrios del sur de la Ciudad. Asegura que la Nación gasta mucha plata para que los porteños vivan bien y advierte: “No sirve la lógica de que la oposición regula.”
Jorge “Quito” Aragón tiene 46 años y desde los 16 milita en la zona que se conoce como el Bajo Flores, que agrupa los barrios Rivadavia, Mitre y Urquiza y, desde hace unos años, la Villa 1-11-14, en el sur de la Ciudad, donde cada vez hay más casas precarias, villas y asentamientos. Quito está orgulloso de su identidad villera, y es por eso que pretende, desde la lista del Frente para la Victoria, llegar a la Legislatura porteña para “que la Ciudad esté en consonancia con un proyecto que sea más equitativo, que aporte a la construcción de calidad de vida de los que menos tienen”.
Durante la entrevista con Tiempo Argentino, el candidato que ocupa el cuarto lugar en la lista 604 aseguró: “Esta ciudad no puede seguir ajena al país, la ciudad es el país.”
–¿Por qué quiere ser legislador?
–Primero, para hacer lo que venimos demostrando a nivel nacional. Segundo, porque esta es una ciudad superavitaria, produce más plata de la que tiene que gastar. Tenemos que ganarle al muchachito que su padre echó de las empresas, –lástima que nos lo mandó a nosotros– , al mal gerente que supuestamente no iba a robar porque ya tenía plata, al que subejecuta las partidas de políticas sociales para darle más plata a sus amigos, que se baja de la disputa nacional de proyectos antagónicos sólo para seguir sosteniendo los negocios de sus amigos. Tenemos que ganar la Ciudad y sostener nuestro proyecto en la Legislatura. La Legislatura sostiene una construcción política para poder llevarlo a cabo. No sirve la lógica de que la oposición regula. La oposición tiene objetivos antagónicos a los míos, no quiere que los pobres vivan bien, no quiere que todos tengamos casa, no quiere que todos tengamos trabajo, porque lo que hicieron cuando fueron gobierno fue exactamente lo contrario, nos dejaron sin casa y sin trabajo.
–¿Ese mismo objetivo se comparte en las villas?
–Las villas se crean como consecuencia de esas políticas, nosotros no queremos ser toda la vida villeros, si bien estamos orgullosos de serlo. Si hay un lugar donde se mantiene la solidaridad es en nuestros barrios, es una cuestión identitaria y cultural. En un edificio no se conoce al vecino de al lado y nosotros nos conocemos todos. Cuando vemos la cara de uno sabemos de qué familia es. Y tenemos los problemas que tiene el resto de la sociedad, pero agravados por nuestras condiciones económicas. Creemos que de la única manera que se sostiene este proyecto es ganando el Ejecutivo y teniendo la mayor cantidad de legisladores en la Ciudad. No soy ajeno al sector social que pertenezco. No pensar en la problemática de los villeros sería estar enfrentado con mi propia identidad, no pensar en el sur, también. Soy parte de la Corriente Nacional Martín Fierro que tiene laburo en todo el país, somos consecuencia de una construcción política basada en los sectores más marginados de esta sociedad.
–En 2007, Macri cosechó muchos votos en los barrios más pobres de la Ciudad, ¿qué estrategia electoral se va a dar en el kirchnerismo hacia esos sectores?
–Hay que mostrar los beneficios que recibe la Ciudad del Estado Nacional. Desde el macrismo tienden a desdibujar las políticas y anunciarlas como propias. Al mismo tiempo, ven que empiezan a perder votos si no lo dicen. Entonces María Eugenia Vidal tuvo que decir que el gobierno nacional hizo bien algunas políticas. Eduardo Duhalde habló de lo buen gobernante que es Néstor. Intentan quedarse con una parte de la adhesión que tiene el gobierno nacional. Nosotros gobernamos mejor y nosotros tenemos propuestas. Ellos no. Macri redujo sistemáticamente el presupuesto en salud y educación, en políticas sociales, y aparte de reducirlo, lo subjecutó para que el arca municipal se quede con los recursos y los distribuya como quiera, en beneficio de sus amigos empresarios. Nosotros vamos a hacer llegar las políticas nacionales a los lugares a los que no ha llegado pero por fuera de la lógica de municipal, por medio de la acción directa, y vamos a mostrar que son políticas claras del gobierno nacional y no del municipal.
–¿Cuál es el rol que les cabe en ese sentido a las organizaciones sociales?
–Las organizaciones sociales hemos trabajado para que les llegara a los compañeros la asignación familiar, porque el Estado municipal no se lo permitía. Lo único que les interesa es manejar los recursos de la Ciudad y no repartirlos en el conjunto de la sociedad, con prioridad en los sectores que menos tienen. ¡No tiene lógica darle más plata al que más tiene! Una de las cosas que hace que esta ciudad tenga las condiciones económicas que tiene es por la existencia del recurso nacional, buena parte del trabajo de la gente de esta ciudad es por los ministerios federales. No es una tontería, gastamos acá un montón de plata como Estado Nacional que hace que todos los porteños vivan bien, por eso me parece que tiene que estar en consonancia con un proyecto que sea más equitativo que aporte a la construcción de calidad de vida de los que menos tienen. Esta ciudad no puede seguir ajena al país, la ciudad es el país