The Corbett Report, Traducción por Ivana Cardinale para el Correo del Orinoco

Cuando el presidente Obama anunció la muerte de Bin Laden por televisión visto la noche del domingo alrededor del mundo, se convirtió en el noveno Jefe de Estado o funcionario de gobierno de alto rango que lo ha hecho.

Dado el documentado problema de riñones de Bin Laden y la consecuente necesidad de diálisis, funcionarios del gobierno, jefes de Estados y expertos contra terrorismo han opinado repetidamente que el líder de Al Qaeda ha estado muerto por algún tiempo. Estas afirmaciones están basadas en la salud débil de Bin Laden a finales de 2001 y signos visibles de su deteriorada condición, así como los informes reales de su muerte por el mismo período de tiempo.

En julio 2001, Bin Laden fue trasladado en avión al Hospital Americano en Dubai para un tratamiento de riñón. Según fuentes de inteligencia franceses, él estaba allí a cargo del agregado local de la CIA. Cuando el agente después se jactó de su encuentro con sus amigos, fue llamado de inmediato a Washington.

En la víspera del 11 de septiembre, Osama Bin Laden estaba en un hospital militar paquistaní bajo la observación del ISI de Paquistán, que es el equivalente paquistaní de la CIA con profundos vínculos con la comunidad de inteligencia estadounidense.

En octubre del 2001, Bin Laden apareció en un video con uniforme del ejército y un tocado islámico, visiblemente pálido y demacrado. En diciembre 2001, otro video fue publicado, esta vez mostrando un seriamente enfermo Bin Laden quien estaba aparentemente incapacitado de mover su brazo izquierdo.

Entonces el 26 de diciembre 2001, Fox News informó sobre un reporte del diario Paquistán Observer de que el Talibán había pronunciado oficialmente la muerte de Bin Laden a principios de ese mes.

Según el reporte, el fue enterrado en menos de 24 horas luego en una tumba sin marcar, de acuerdo con la práctica sunita Wahabbist.

Lo que siguió fue una serie de pronunciamientos de funcionarios afirmando lo que era ya obvio: supuestamente viviendo en cuevas y bunkers en el pasaje montañoso entre Afganistán y Paquistán, Osama Bin Laden habría sido privado del equipo de diálisis que él requería para vivir.

El 18 de enero 2002, el presidente de Paquistán Pervez Musharraf anunció muy rotundamente: “Yo ahora pienso, francamente, que él está muerto”.

El 17 de julio 2002, el entonces jefe del contra-terrorismo en el FBI, Dale Watson, dijo en una conferencia de oficiales del orden público que “Bin Laden probablemente no está más con nosotros”, antes de añadir cuidadosamente que “No tengo evidencia que apoye eso”.

En octubre 2002, el presidente afgano Hamid Karzai dijo a CNN que “Me gustaría llegar a creer que Bin Laden probablemente esté muerto”.

En noviembre 2005, el senador Harry Reid reveló que le habían dicho que Bin Laden podía haber muerto en el terremoto de Paquistán en octubre de ese año.

En septiembre 2006, la inteligencia francesa filtró un informe que sugería que Bin Laden había muerto en Paquistán.

El 2 de noviembre 2007, la ex primer ministro paquistaní Benazir Bhutto le dijo a Davis Frost de Al Jazeera que Omar Sheikh había asesinado a Osama Bin Laden.

En marzo 2009, el ex oficial de inteligencia para el exterior de EE.UU. y profesor de relaciones internacionales en la Universidad de Boston, Angelo Codevilla afirmó: “Toda la evidencia sugiere que Elvis Presley está más vivo que Osama Bin Laden’.

En mayo 2009, el presidente paquistaní Asif Alí Zardari, confirmó que sus “contrapartes en las agencias de inteligencia estadounidenses” no habían escuchado nada de Osama Bin Laden en siete años y confirmó “No creo que él esté vivo”.

Ahora en 2011, el presidente Obama se añadió a sí mismo a la mezcla de personas en posiciones de autoridad que han pronunciado la muerte de Osama BIn Laden.

Algunos podrían acusar que ninguno de estos informes anteriores tenían alguna credibilidad, pero como ahora emerge que el cuerpo de Bin Laden fue sepultado en el mar a menos de doce horas de su muerte sin oportunidad de corroborar su identidad, la misma cuestión de credibilidad tiene que ser nivelada a su ultimo cargo.

En este punto, la única evidencia que nos ha sido suministrada de que Osama Bin Laden fue asesinado ayer, son algunas imágenes de TV de un recinto quemándose y la palabra de Barack Obama.