El postulante, que el 5 de junio definirá la presidencia con la conservadora Keiko Fujimori, prometió «un gobierno de cambio, un gobierno nacionalista», en un recorrido por la región norandina de Cajamarca.
Humala encabeza las preferencias ciudadanas, según una nueva encuesta esta vez de la empresa Imasen, que le asigna 42 por ciento de respaldo frente a 37,8 por ciento de Fujimori, 15,6 de indecisos y 4,6 que no han tomado una decisión.
En la votación real solo se toman en cuenta los votos por uno u otro candidato, lo que significa que, según las cifras del sondeo, Humala tendría 52,6 frente a 47,4 de su rival.
Hay un virtual empate en los sectores urbanos, en los que Humala tiene 39,6 y Fujimori 39,5, mientras el primero tiene primacía en los rurales (50,8-31).
El electorado masculino se inclina por él (49,7-31,9) y el femenino por ella (43,7-34,2).
La diferencia general a favor de Humala es similar o ligeramente inferior a las registradas en anteriores sondeos de las empresas Ipsos Apoyo y CPI.
Otro sondeo posterior, de la firma Datum, redujo esa ventaja de menos de dos por ciento, lo que la prensa fujimorista celebró como un virtual empate.
El sondeo de Datum es cuestionado por el analista Jorge Bernedo, quien señala que sobredimensiona Lima y el norte, donde Fujimori tiene más presencia, y minimiza regiones en las que tiene fuerte ventaja Humala.
En su recorrido por Cajamarca, Humala emplazó en forma tácita a su rival a rendir cuentas de los gastos de su campaña electoral -obligación legal que no ha cumplido- e indicó que él sí lo ha hecho.
El candidato nacionalista dijo también que sus fondos de campaña son de aportantes nacionales, mientras la prensa conservadora insiste en sostener, sin pruebas, que recibe dinero del exterior.