
Musharraf dijo que Obama muestra tal actitud a raíz de la operación de un comando de las fuerzas especiales SEAL del Pentágono que mató en Pakistán al jefe de la red extremista Al Qaeda Osama bin Laden, el pasado 2 de mayo.
Sobre el tema, el exdignatario afirmó que la incursión puede considerarse un «acto de guerra», porque «ciertamente, ningún país tiene derecho a entrometerse en cualquier otro».
Ese comportamiento de Obama de mostrarse «con un no me importa tu opinión nacional, no nos importa su pueblo, vamos a venir y hacer lo mismo, si fuera necesario. Esta es la arrogancia», subrayó Musharraf.
Reconoció además que fue un «accidente terrible, un terrible fracaso» que la inteligencia pakistaní no supiera el paradero de Bin Laden, más si vivió durante años en un complejo residencial de Abbottabad, a poca distancia de una academia militar. En cuanto a su muerte dijo que es un acto «absolutamente ilegal».
Como consecuencia de la operación las relaciones entre los dos países se tensaron, e Islamabad pidió la reducción de la presencia militar de Washington en la nación asiática.