Alberto Gutierrez Dutra (*)


El caso es hipotético pero muy interesante para un ejercicio de análisis y su relación con el caso de deportación / expulsión del camarada Joaquín Pérez Becerra, arribado al aeropuerto de Maiquetía, territorio venezolano. Tras un supuesto pedido del presidente colombiano Santos y siendo parte de la lista roja de INTERPOL, el país que lo detecta debe cumplir con sus compromisos en materia de derecho internacional (y digamos para no ser acusados de colaborar con el “terrorismo”) y colaborar trasladando al periodista sueco-colombiano Pérez Becerra.

Ahora si vamos a nuestro caso: la base de datos de INTERPOL incluyen en la famosa Lista Roja de extraditables al más buscado terrorista del mundo, aún no capturado ni por los EE UU o la OTAN: Osama Ben Laden (clikear por favor). Como verán de acuerdo a los datos suministrados, el susodicho nacido el 10 de marzo de 1957 en Jeddah, Arabia Saudí, está acusado por crímenes contra la vida y la salud, delito de uso de armas y explosivos, terrorismo y conspiración de terrorismo, casi los mismos cargos que Joaquín.

Pero que sucede? Osama es reclamado por cortes judiciales de Madrid, Nueva York y Trípoli; y aquí se nos crea una situación que pudiera ser compleja. Como en el caso Mackled, el país que detecta a un delincuente solicitado para ser extraditado, debe hacerlo a aquel que primero lo haya solicitado. En el caso Mackled fue Venezuela quien primero lo pidió, luego EE UU.

Pero volvamos a nuestro caso de análisis: supongamos que haya sido Libia quien hubiere solicitado a Ben Laden primero, o supongamos que lo hubiera solicitado antes EE UU y Obama llama a Chávez solicitando que extradite a Osama. Imaginemos por un momento esta situación. Chávez tendría que extraditarlo y punto?

Por suerte, y aunque alguna vez algun loquito dijo que Ben Laden había sido visto en Margarita, el caso hipotético no ocurrirá.


(*) Abogado especialista en Derechos Humanos