Patria grande
Cada invasión va precedida de una historia de abuso sexual que la justifica. La lucha contra la violencia machista es legítima siempre y cuando no se utilice como una estrategia de propaganda para justificar sangrientas invasiones.
No avalamos la violencia contra la mujer, pero sí identificamos que las trasnacionales de la comunicación -artillería ideológica imperial- siempre visibilizan “casualmente” la historia de agresiones violentas – con connotaciones sexuales- contra una o varias mujeres en los países en los que ellos intervienen “para salvarlos”, al tiempo que silencian las cuantiosas barbaries que cometen los “salvadores”
El mecanismo de propaganda de desprestigio basado en el abuso sexual fue aplicado hoy contra Libia. La embajadora de Estados Unidos en la ONU, Susan Rice, acusó hoy a las tropas progaddafi de usar la violencia sexual y de consumir Viagra para favorecer tales fines.
Varios diplomáticos estadounidenses que acudieron a una reunión a puerta cerrada sobre Libia, celebrada en el Consejo de Seguridad en Nueva York, dijeron que Rice planteó la cuestión del Viagra en el contexto del aumento de las noticias que acusan a las tropas oficiales libias de cometer abusos sexuales.
Rice no presentó pruebas de sus acusaciones, ni de la supuesta ingesta masiva del medicamento por parte de los soldados libios.