Esto se debe a que el líder libio ya no les servía luego de “alimentar y proteger a su Gobierno en los últimos 13 años”, indicó el intelectual argentino en una entrevista con La Radio del Sur.
“No debemos sorprendernos si un comando, en lugar de hacer lo que hicieron con (Saddam) Hussein en Irak, lo maten ahí mismo en el marco de esta operación militar”, advirtió.
Borón agregó que “la ferocidad con la que han respondido ciertos países europeos en contra de Gaddafi demuestra que están interesados en acabar con él cuanto antes”.
El intelectual se preguntó por qué las potencias occidentales no invaden a Bahréin o a Yemen, donde gobiernan regimenes monárquicos o dictaduras, y que en la actualidad viven masivas protestas que fueron reprimidas.
“¿Es qué acaso la vida de ellos vale más que la de los libios? ¿Por qué no se ataca a los gobiernos autocráticos de esos países?”, remarcó.
Borón también explicó que la postura de China de rechazo a la intervención en Libia, que no vetó la resolución contra la nación norafricana del Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), tiene “que ver con la relación que tiene esa nación con otros países del mundo árabe”.
Borón además aclaró que el Gobierno Gaddafi tiene muy poco que ver con la situación de otros países en América Latina como Venezuela, Bolivia y Cuba, “donde ha habido esfuerzos sistemáticos de sus gobiernos por mejorar las condiciones de vida de la población y favorecer el ascenso social de los sectores marginados”.
“La única salida posible para Libia estaba en buscar una mediación que pusiera fin al conflicto, pero lamentablemente la mediación no pudo ser implementada, en parte porque los sectores atrincherados en la ciudad de Bengasi se manifestaron en contra de la iniciativa. Esa medida les hubiese salvado del bombardeo”, resaltó.
El politólogo sostuvo que las potencias occidentales buscarán implementar “un gobierno títere” en el este de Libia, donde se encuentran los grupos rebeldes armados, “que haga que las riquezas de esa región del mundo pasen a ser controladas directamente por Europa y sus aliados, previo un baño de sangre como el que están perpetrando en este momento”.