El argentino, de 35 años, es el quinto al mando de la primera fila de la columna Teófilo Forero, que actúa entre los departamentos (provincias) de Huila y Caquetá (sur), dirigida por alias El Paisa, uno de los jefes más violentos de las FARC, puntualizó la fuente del servicio militar de inteligencia.
«No sabemos cómo ingresó al país, lo que sabemos fue que entró en contacto con las FARC hace siete años en la zona de distensión», entre los departamentos de Meta y Caquetá, donde el gobierno del presidente Andrés Pastrana (1998-2002) realizó un frustrado diálogo de paz con esa guerrilla, señaló el investigador.
«Él es un combatiente armado, identificado entre las FARC con el alias de Camilo el argentino, cuyo trabajo principal es ser organizador de masas, estar en contacto con los campesinos y organizar protestas», explicó la fuente que requirió no ser identificada y que trabaja en la zona.
Morares inicialmente intentó unirse a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) a través del abatido jefe militar de esa guerrilla, alias Mono Jojoy, pero no logró ganarse su confianza porque creía que era un extranjero infiltrado, explicó la fuente.
Sin embargo, Morares, quien militó en su país en las juventudes comunistas, logró entrar a las filas de las FARC a través de uno de los comandantes de la Teófilo Forero, y recibió entrenamiento militar por tres meses, de acuerdo con la información de inteligencia.
El investigador señaló que la identificación del argentino dentro de las filas de las FARC se logró a través de información encontrada en campamentos de esa guerrilla tras ser bombardeados y por testimonios de rebeldes que se han entregado al Ejército.
Morares es el segundo extranjero en las FARC del que los servicios de inteligencia militar tienen información.
Una joven holandesa, Tanja Nijmeijer, también ha sido identificada como integrante de esa guerrilla, la principal de Colombia con un estimado de 8.000 combatientes, según el Ejército.