El periódico californiano recuerda que el pasado año el gobierno estatal recortó entre 35 y 90 dólares la ayuda a esas personas.
Además, subraya, desde el 1 de enero último casi medio millón de discapacitados que reciben asistencia en sus hogares bajo el programa IHSS, vieron reducir hasta en dos terceras partes la cantidad de horas de ayuda a las que tenían derecho.
La nueva propuesta del gobernador además de otorgarle menos fondos cobraría también parte del MediCal, un seguro médico público para personas pobres.
«Le pedimos al gobernador que no castigue a los más débiles, que no nos recorte la ayuda a las personas que estamos en condiciones tan vulnerables», manifestó.
Navarro aconsejó que para reducir el déficit, el gobernador apruebe un impuesto a las compañías petroleras, que elimine la evasión de impuestos corporativos y que mantenga el gravamen a las licencias de los vehículos.
La propuesta del jefe de gobierno californiano incluye fuertes recortes para programas de salud, educación y ayuda a los sectores con menos recursos.
Asimismo, destina menos dinero a los sistemas de educación y de salud, rebaja el salario a trabajadores públicos y pide la extensión de aumentos de impuestos aprobados el año pasado por otro lustro.
El proyecto prevé recortar 500 millones de dólares de los fondos destinados a la Universidad de California y la Universidad Estatal de California, mientras los colegios comunitarios recibirán 400 millones menos.