Panorama Alternativo
Más de 2.000 policías se enfrentaron en Berlín, Alemania, a activistas que se negaban a desalojar uno de los «squats» –casas tomadas- más antiguos de la ciudad.
Unas 32 personas fueron detenidas y ocho policías resultaron heridos en los disturbios ocurridos en el edificio de la calle Liebigstrasse número 14, cuyos 25 residentes se niegan a abandonar.
Los habitantes «okupas» habían tomado el edificio originalmente en 1990 y más tarde se convirtió en un proyecto de viviendas.
Situado en la zona de Friedrichshain del este ex comunista de Berlín, la casa se ha convertido en un símbolo de la controversia entre los desarrolladores de viviendas y los residentes, en gran medida de izquierda, que se oponen a lo que califican como un aburguesamiento de la zona, originalmente de clase obrera pero que tras la caída del Muro se puso de moda.