Matriz del Sur / Telam / Telesur

 

Washington.-El gobierno de Barack Obama quiere que el gobierno de Cristina Kirchner brinde explicaciones sobre qué pasó con el avión militar estadounidense que aterrizó en Ezeiza el 10 de febrero con expertos militares y equipos de entrenamiento para darle cursos sobre «rescate de rehenes» y «técnicas de manejo de crisis» a la Policía Federal.

Un vocero del Departamento de Estado dijo que el gobierno estadounidense quiere, además, que el gobierno argentino le devuelva “inmediatamente” todo el material incautado en Ezeiza después del aterrizaje, incluyendo la valija.

Anoche el canciller Timerman difundió un comunicado anticipando que hará una protesta formal ante Washington.

 

De acuerdo a un comunicado de la Cancillería argentina dado a conocer el sábado, fueron incautados cerca de mil pies cúbicos de material que no había sido declarado de antemano: equipos de transmisión, mochilas militares, medicamentos, que según los funcionarios estaban vencidos, pen drives, drogas estupefacientes y narcóticas y estimulantes del sistema nervioso.

 

Este es el comunicado que emitió el gobierno de EEUU:


Estados Unidos, a través de un comunicado recibido hoy de parte de la vocera del Departamento de Estado, Virginia Staab, dio su propia versión acerca de la incautación por parte de la Aduana argentina de material procedente de un avión militar estadounidense que intentó ingresar ilegalmente mercadería a nuestro país.

«En la tarde del 10 de febrero, un avión militar de Estados Unidos llevando expertos y equipos de entrenamiento, aterrizó en el aeropuerto argentino de Ezeiza, previamente autorizado y aprobado por el gobierno de Argentina», señala el comunicado.

«El propósito de la visita era un intercambio de entrenamiento entre militares expertos estadounidenses y la Policía Federal Argentina, centrado en rescate de rehén avanzado y técnicas de gestión de crisis», agrega el texto.

«La visita, parte de nuestra contínua cooperación con Argentina en seguridad ciudadana, había sido completamente coordinada y aprobada por el Ministerio de Seguridad y el Ministerio de Relaciones Exteriores del gobierno de Argentina», acota.

Y asegura que «aunque el cargamento fue debidamente manifestado en conformidad con discusiones y entendimientos previos, inesperadamente las autoridades argentinas entablaron una búsqueda prolongada y detallada del cargamento del avión, reteniendo ciertos artículos».

Como consecuencia de esa acción, la actividad de entrenamiento fue cancelada y el avión con el equipo de entrenamiento ha partido de Argentina.

«Estamos buscando explicaciones del gobierno de Argentina respecto a esta cuestión, dado que cualquier inquietud de su parte, pudo haber sido tratada a través de canales diplomáticos normales», señala el parte de Estados Unidos.

Y agrega que «Estamos buscando la devolución inmediata de todos los artículos retenidos por el gobierno de Argentina».

«Todos los artículos eran material que normalmente serían llevados durante un ejercicio de entrenamiento de esta naturaleza», explica.

Por su parte, Estados Unidos admitió el contacto del subsecretario Valenzuela con el canciller Timerman para «expresar inquietud con la manera en que las autoridades de Argentina estaban manejando una misión que había sido acordada previamente».

La Cancillería argentina informó hoy que el comunicado emitidio por el Departamento de Estado de los Estados Unidos «contiene una serie de inexactitudes y omisiones».

 

Los hechos reales

El pasado día jueves 10 de febrero y luego del aterrizaje del avión, la Aduana procedió a realizar un chequeo de la carga y allí se descubrió que buena parte de ella no figuraba en el listado «de buena fe» provisto por la Embajada.

Fue así que la Aduana procedió a liberar la carga ingresada legalmente e incautó lo intentado ingresar en contravención a las leyes.

Cancillería señala que «entre el material incautado, al que no hace referencia el Departamento de Estado, hay desde armas hasta diferentes drogas, entre otras, varias dosis de morfina».

«Además se han intentado ingresar al país material para interceptar comunicaciones, varios GPS de una sofisticación reveladora de su potencia, elementos tecnológicos conteniendo códigos caratulados como secretos, así como un baúl completo con drogas medicinales vencidas», agrega la información.