Página12 / Matrizur
Por segundo día consecutivo, el vocero del Departamento de Estado de los Estados Unidos se mostró exasperado porque el gobierno argentino no le devuelve a su país el material bélico incautado en Buenos Aires. “No sabemos qué más podemos decirles”, sostuvo ayer Philip Crowley, el portavoz del ministerio que encabeza Hillary Clinton. La Cancillería argentina ya había explicado que no consideraba respondida la “enérgica” nota de protesta presentada diez días atrás en la embajada norteamericana, debido al material que planeaban ingresar por Ezeiza sin declarar. Por otro lado, algo que el gobierno norteamericano debería saber, las cosas incautadas están en manos del juez que instruye la causa, por lo que no pueden ser devueltas hasta que las liberen.
Luego de algunos días de silencio, el vocero Crowley volvió a la carga el miércoles cuando en uno de sus seis tweets se quejó por lo que, sostenía, era una negativa argentina a resolver el tema. “Estamos sorprendidos de que Argentina haya elegido no resolver una simple disputa involucrando equipamiento de entrenamiento y queremos nuestros materiales de retorno”, escribió.
Se refería al material incautado el 10 y 11 de febrero pasado, cuando un avión de la fuerza aérea norteamericana llegó con personal y material bélico para brindar un curso a la Policía Federal. Pero en la inspección realizada por las autoridades argentinas encontraron material que no había sido declarado, como equipos para transmitir mensajes cifrados, intervenir conversaciones telefónicas y hasta cierto tipo de drogas.
El tweet de Crowley reavivó el tema y levantó polvareda. Horas después, la cartera que encabeza Héctor Timerman emitió un comunicado remarcando la falta de respuesta “satisfactoria” a la nota de queja presentada por el hecho. Para Crowley eso ya había sido contestado, pero el comunicado de la Cancillería subrayó que “no considera como respuesta” la nota enviada por el gobierno estadounidense la semana anterior.
Ayer, el vocero de Clinton –que ofrece conferencias de prensa diarias para hablar de los más diversos temas– volvió a la carga, ya con un tono de desencanto. “Esto ha sido objeto de un montón de conversaciones. Le hemos enviado notas diplomáticas al gobierno de Argentina. Hemos revisado con ellos la coordinación, tanto antes de la llegada del avión y desde entonces. Sencillamente no sabemos por qué no se ha resuelto esto aún”, insistió ayer. Para el vocero, la situación está “en manos de Argentina”.
El portavoz no hizo ninguna referencia a que el material incautado está bajo custodia judicial y que necesariamente debe ser liberado por el juez, algo que seguramente sucederá en los próximos días. “Sencillamente no entendemos por qué no se ha resuelto aún este tema. Seguimos queriendo que nos devuelvan el material”, insistió Crow-ley, quien esta vez no mereció ninguna nueva respuesta argentina.