La responsable del proyecto de esta vacuna en el Centro de Inmunología Molecular (CIM) de La Habana, Gisela González, explicó que ofrece la posibilidad de convertir el cáncer avanzado en una “enfermedad crónica controlable”.
CIMAVAX-EGF es resultado de más de quince años de investigación, va dirigida hacia el sistema relacionado con el tumor y no provoca efectos adversos severos, precisó la especialista.
“Está basada en una proteína que todos tenemos: el factor de crecimiento epidérmico, relacionado con los procesos de proliferación celular, que cuando hay cáncer están descontrolados”, detalló.
González indicó que como el organismo tolera “lo propio” y reacciona contra “lo extraño”, por eso tuvieron que hacer “una composición tal que lograra generar anticuerpos contra esta proteína”.
Además, puede ser utilizada como un tratamiento “crónico que aumenta las expectativas y la calidad de vida del paciente”.
La investigadora señaló que después de alcanzar su registro en Cuba, actualmente el CIMAVAX-EGF “progresa” en otros países y que se evalúa la forma de emplear su principio en terapias contra otros tumores como los de próstata, útero y mamas.