Agencias

Brasilia, diciembre 27 – El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien dejará el Gobierno el próximo sábado, lamentó hoy que la relación de EEUU con América Latina no haya cambiado nada bajo la gestión de Barack Obama y criticó el papel de ese país en las negociaciones de paz en Oriente Medio.

“La relación (entre América Latina y Estados Unidos) cambió poco. La verdad es que no ha cambiado nada y veo eso con tristeza”, dijo Lula durante un desayuno con periodistas realizado en el Palacio presidencial de Planalto, en el que abordó las relaciones de la Casa Blanca con el resto del mundo.

Lula recordó que poco después de asumir la presidencia, Obama tuvo un encuentro con los líderes de los países de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) durante la V Cumbre de las Américas que se celebró en Trinidad y Tobago, pero dijo creer que ni aún con esa cita Estados Unidos entendió la importancia de América Latina.

También evocó que en varias conversaciones le comentó a Obama que debía haber un cambio de visión en la política estadounidense en relación a los países latinoamericanos, pero también dijo creer que ese mensaje no fue comprendido.

«En Estados Unidos deben comprender la importancia de América Latina”, insistió Lula, quien subrayó que se trata de una región democrática, de paz y sin bombas nucleares».

Apuntó que hay más de 35 millones de latinoamericanos viviendo en Estados Unidos y que, en el caso de naciones de Centroamérica, hay más personas viviendo allá que en sus propios países, por lo que, dijo, que no puede entender que Washington aún se comporte como un imperio en su relación con la región.

“Espero que Obama visite Brasil en 2011, pero lo importante es que visite no sólo este país, sino todos nuestros países, para que conozca nuestra realidad”, indicó.

El desayuno celebrado hoy con los periodistas supuso la última rueda de prensa de Lula, quien el próximo sábado le entregará a la presidenta electa, Dilma Rousseff, el cargo que ocupó desde enero de 2003.

Como ha hecho en los últimos meses, ya próximo del final de su segundo mandato, Lula se negó a dar pistas sobre su futuro, pero reiteró que no aceptará ningún cargo internacional, en un comentario que aprovechó para otra crítica velada a Estados Unidos.

“Si un ex presidente de Brasil va a la secretaría general de la ONU, después podría ir un ex presidente de Estados Unidos y ahí las cosas serían más difíciles”, apuntó.

En ese marco, aseguró que no habrá acuerdo en Oriente Medio mientras en Estados Unidos crean que puede construir la paz solos, porque ellos son parte del conflicto.

Lula reiteró su opinión de que si no se sientan a la mesa todos los sectores involucrados en el conflicto, no habrá posibilidad para la paz.

En ese sentido, insistió en que existen muchos intereses y que todos deben ser contemplados, y dijo estar convencido de que el pueblo de Estados Unidos quiere la paz, así como también la quieren muchos sectores israelíes y palestinos, pero puso en duda que todos los participantes en las negociaciones tengan el mismo objetivo.