– ¿Cómo está la lucha por la tierra y territorio en el contexto de las transnacionales y el conflicto armado interno?
– Creemos que lo uno no va desligado de lo otro, las transnacionales tienen que ver con el conflicto colombiano, este no se da de forma gratuita según el gobierno porque hay terrorismo, no es cierto. Es una política y es evidente en Colombia que es una política de las transnacionales para generar guerra, los que -como dicen- logran pescar a río revuelto son ellos casualmente y pescan económicamente, porque ellos obviamente engrosan las arcas económicas del imperialismo.
– Casi siempre las masacres contra campesinos ocurren en territorios donde hay páramos con diversidad biológica…
– Si, estableciendo digamos como un mapa comparativo donde empezamos como a querer buscar la razón de por qué nos desplazan nos asesinan, si seguimos siendo explotados toda la vida, somos de microminifundio. Entonces buscando esa razón encontramos que en las zonas donde se desplazan campesinos y líderes que piensan distinto y que quieren defender su territorio y su pedacito de tierra que es su propiedad, es ahí donde las transnacionales están instalando megaproyectos y es ahí donde ocurren esas muertes, masacres, asesinatos, desplazamientos masivos y se logra opacar el proceso social y el pensamiento distinto digamos de soberanía y de rescate de lo nuestro.
– Es decir la guerra contra la guerrilla y el narcotráfico es una excusa del gobierno colombiano para «limpiar» los territorios de campesinos en favor de las transnacionales…
– El tema del terrorismo se ha convertido en la excusa, lo nombran en todos los medios de comunicación y los medios lo manejan todos los días diciendo lo mismo, que hay que luchar contra el terrorismo de tal manera que todo el mundo se lo crea. Y sólo vemos que sólo es la excusa porque al contrario si se establece también un comparativo entre los gobiernos anteriores -aunque han sido de derecha- con el del presidente Uribe, obviamente hay más muertos en esas zonas casualmente, hay muchos más desplazamientos. Inclusive lo dice la Corte Penal Internacional, hay pronunciamientos de la Naciones Unidas por ejemplo, de que en Colombia el problema de derechos humanos se está agudizando, entonces no hay resultados concretos.
El Plan Colombia que nos lo vendieron como que iba a ser la salvación en el país para la erradicación de la coca y de la amapola que son productos con los que el narcotráfico crece, eso no es cierto lo que se está haciendo es agudizar. Todo apunta a que antes está agudizandose el conflicto en esas zonas y sin embargo llegan después de haber sacado a la gente de los territorios llegan las transnacionales, inclusive disfrazadas con nombres del país.
En este momento por ejemplo, en la región del macizo colombiano que es donde nacen cuatro ríos principales de Colombia que son el Magdalena, Caquetá, Patía y Cauca. Esos cuatro ríos nacen en esa región y ahí por ejemplo se sabe que está solicitado en concesión por la tranasnacional Anglogolachanti que allá la llaman Quedada para en una primera fase de exploración de recursos mineros.
– ¿Y la reivindicación de la soberanía alimentaria?
– La soberanía es precisamente tener nosotros el derecho, la autonomía de saber que sembramos que consumimos y en qué calidad. Para nosotros qué es la calidad, el mismo Plan Mundial de Alimentos PMA nos vende una idea de seguridad alimentaria y nos asegura la comida pero poniéndola como mercancia en las tiendas de todo el mundo. Para nosotros la soberanía tiene que apuntar a que los mismos campesinos y campesinas que habitamos los territorios históricamente somos los que decidimos que sembrar, la calidad no la venden cuando nos venden un tomate brillante sin rayas sin pintas sin pecas que ese es el perfecto, pues mentira ellos han acaparado toda esa producción en almacenes de grandes cadenas que son las que fortalecen a las multinacionales.
Nosotros decimos que las pecas y todas las manchas -que ellos dicen que eso no debe ser así-, para nosotros ese es el alimento y un alimento que nos hace susbsistir hasta los 90 o 100 años.
– Los transgénicos son un peligro para la salud de ustedes y para el medio ambiente…
– También estamos contra los transgénicos, este es otro eslabón de esa cadena dañina que obviamente no se lo puede pasar por alto, no podemos soltar en manos del capitalismo de que manejen el alimento nuestro. Pero la comida sana donde no tuvimos que depender de insumos externos, la misma finca era autosuficiente y ahora Monsanto se da la tarea de vendernos todo el paquete, nos vende los insumos, ahí mismo viene la enfermedad, para luego vendernos el veneno y con este resultamos siendo más enfermos, más vulnerables, nuestra finca se va degradando y tenemos que comprarle la semilla.
En Colombia está pasando algo gravísimo, en este momento el ICA (Instituto Colombiano Agropecuario) está diciendo claramente en un decreto que queda prohibido transportar las semillas nativas que las cuidábamos ahí sin veneno. Es decir, estamos llegando al extremo, son aberraciones demasiado grandes ni siquiera contra Colombia sino es contra el mundo y contra la humanidad.