Desde las seis bases en la Antártida hasta la última vivienda de La Quiaca, en Jujuy, somos 40.091.359 los habitantes de la República Argentina. Los datos provisionales del Censo 2010 se presentaron ayer por la mañana en la siempre ventosa, y estos días particularmente gélida a pesar del pleno diciembre, capital de la provincia de Santa Cruz, Río Gallegos. Las autoridades del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) eligieron esta ciudad, donde nació y también gobernó Néstor Kirchner, como homenaje al ex presidente que murió el pasado 27 de octubre, día en que se realizaba el Censo en todo el país. Estos primeros datos, que se complementarán en junio y diciembre del año próximo, revelan que en el país hay más mujeres (19,5 millones) que hombres (20,5 millones), y que los argentinos habitan en 14.279.149 viviendas.
En el acto realizado en la Casa de Gobierno provincial, con la presencia del gobernador Daniel Peralta y la directora del Indec, Ana María Edwin, entre otros funcionarios, el director técnico del organismo estadístico, Norberto Itzcovich, aclaró que el número relevado representa un incremento poblacional del 10,6% desde 2001, año del censo anterior, cuando el aumento respecto de 1991 fue del 10,1%. Si se lo lleva a tasas anuales, este incremento es de un 1,17%, lo que supera también el parámetro registrado en la década de 1991-2001, que fue de un 1,01%. La densidad de población pasó de 13 habitantes por kilómetro cuadrado en 2001 a 14,4 en 2010.
Entre otras razones, los funcionarios nacionales atribuyeron el aumento de habitantes a las políticas inclusivas desarrolladas en los últimos años, que disminuyeron la tasa de mortalidad infantil, mejoraron la calidad de vida en la población pasiva, promovieron la documentación y produjeron la migración de países limítrofes. Por ejemplo, la tasa de mortalidad infantil decreció del 16,3 por mil en el 2001 al 12,1 por mil este año. Como contexto Itzcovich dio que la cobertura previsional, por otro lado, subió del 79,4% en 2003 al 91,8% en el 2010. Y las viviendas con piso de material pasaron del 79,7% en 2003 a un 83,6% en 2010; y el gas en red, de un 66,8% al 71,2% de las viviendas.
La provincia donde más impactó esta expansión poblacional fue Santa Cruz, justamente donde se realizó el anuncio. Creció en un 38,4% (de 196.958 a 272.524) y, tal como declaró el gobernador Peralta, “dejamos de ser una zona desértica, ya que hemos superado el habitante por kilómetro cuadrado”. Hasta el último registro, Santa Cruz tenía 0,8 habitantes/km2. El nuevo Censo estableció que ese número trepó a 1,1 habitantes /km2. Peralta dijo que se debió a “políticas proactivas hacia la Patagonia”. Como contraparte, la Ciudad de Buenos Aires es la que menos creció: apenas un 4,1% (de 2.776.138 a 2.891.082). La provincia de Buenos Aires, con 15,5 millones, concentra al 38,9% de la población del país.
Lo procesado hasta hoy, que ya está disponible en la biblioteca y el sitio web del Indec, aporta cantidad de habitantes y viviendas, desagregado por provincia, y dentro de cada una, por departamento. También lo que se denomina “índice de masculinidad”, que es la proporción de hombres y mujeres. El Censo 2010 indica que hay 95,4 argentinos por cada 100 argentinas.
Estos elementos ya permiten estudiar y reformular políticas, según explicó a Tiempo Argentino la directora Ana María Edwin. “Se puede estimar, conociendo la cantidad de población y el crecimiento que ha habido, medidas que hacen a la construcción de vivienda, de escuelas, salas de primeros auxilios. En comunidades que han crecido muy fuerte se van a necesitar médicos, paramédicos. Si el crecimiento es muy alto se sabe que hay relación con aspectos básicos, inclusive a nivel de comunicaciones, que las poblaciones necesitan”. Ante directores de institutos provinciales de estadística, funcionarios del Indec, –como el coordinador del Censo, Roberto Muiños, y representantes de pueblos originarios, de discapacitados y de la diversidad sexual–, Edwin remarcó que este fue el “censo de la inclusión”, ya que para el diseño se convocó a aquellos colectivos que habían sido “invisibilizados”, para que “pudieran plantear sus necesidades”.
Como otro de los ejes fundamentales del operativo, la directora dijo que había tenido una “demanda muy fuerte de parte de los responsables de las políticas públicas en todo el territorio”. Por estas razones, Edwin consideró que el de 2010 fue “el mejor censo de la historia de nuestro país”, aunque también rescató el de 1947.
En el final se descubrió una placa en homenaje a Néstor Kirchner, mientras en la pantalla donde se habían proyectado los datos se veía el rostro del ex presidente rodeado por las palabras: “Millones de lágrimas censadas. Censo del Bicentenario”. La misma imagen que estaba impresa en un pin que lucía en la solapa la mayoría de los presentes