nueva tribuna

El sábado 27 de noviembre Dublín y Roma han vivido multitudinarias manifestaciones convocadas por los sindicatos en contra de los recortes sociales.
En Dublín, la manifestación ha reunido a más de 50. 000 personas y ha contado con la participación de destacados intelectuales irlandeses y se han oído proclamas contra la dictadura de los mercados, contra los especuladores y contra la banca de ese país. En palabra de Jack O’Connor, presidente del principal sindicato irlandés, SITPU, el rechazo al plan de rigor impuesto, ha sido importante, y es considerado por la ciudadanía como «una declaración de guerra contra los trabajadores que ganan menos».

En Roma, donde se ha anunciado una posible huelga general, miles de manifestantes han exigido al Gobierno de Berlusconi la negociación de aspectos importantes relacionados con temas económicos y medidas para luchar contra la destrucción de empleo.

El pasado 24 de noviembre fue Portugal donde se vivió una huelga general, su objetivo era forzar un cambio de las políticas económicas y sociales de su gobierno. En la actualidad están estudiando la convocatoria de nuevas movilizaciones.

En Inglaterra son los estudiantes los que tienen la iniciativa, tal como evidenciaron el pasado 10 de noviembre donde se manifestaron contra la subida de las tasas universitarias y contra las medidas de recorte impuestas por el gobierno del premier Cameron.

Todas estas movilizaciones vienen precedidas de las realizadas a lo largo de todo el año en distintos países. Son conocidas las manifestaciones que durante los últimos meses se vivieron en las ciudades de Francia contra la subida de la edad de jubilación y otras medidas impuestas por el gobierno de Zarkozy, por no hablar de las movilizaciones que desde hace meses realizan los ciudadanos y trabajadores de Grecia, que alternan huelgas sectoriales y generales, el día 15 de diciembre Grecia ha convocado la enésima huelga general. La República Checa tiene convocada una huelga general para el 8 de diciembre.

En España hemos vivido la jornada del 29 de septiembre, que tendrá su continuidad el día 15 de diciembre, coincidiendo con la nueva jornada europea de movilización, y el día 18 de diciembre, sábado, donde los sindicatos esperan que millones de personas se manifiesten en las calles expresando su voluntad de recuperar derechos y defender el Estado Social.

Las protestas y movilizaciones están coordinadas por la Confederación Europa de Sindicatos (CES) que rechaza absolutamente los planes de salida impuestos por la Unión Europea y presionan para evitar la deriva neoliberal tomada por las instituciones europeas, y que ponen en riesgo el propio modelo social europeo. La CES también rechaza la directrices emanadas del ECOFIN, que se arroga competencias en materias salariales, laborales y sociales que no tiene, pero que presionan de manera decisiva a los gobiernos para que apliquen reformas, como en el caso de la reforma laboral impuesta en España.