Patria Grande / TeleSUR

La policía izó este domingo las banderas de Brasil y de Río de Janeiro (sureste) sobre la torre de un teleférico en el Complexo do Alemao (Complejo Alemán) como un símbolo de la ocupación de las favelas.

“Es un acto simbólico, un primer paso”, expresó el delegado Rodrigo Oliveira, quien se desempeña como jefe policial, entre otros que participan en las operaciones.

Las banderas fueron izadas por los mismos policías que, apoyados por el Ejército, incursionaron la mañana (10H00GMT) de este domingo en la populosa barriada brasileña para expulsar a los narcotraficantes que se encontraban atrincherados en el Complejo Alemán (zona norte de Río).

Durante más de dos décadas, el Comando Vermelho (Comando Rojo) controló el Complexo do Alemao, sector que congrega a 15 favelas con una población de 400 mil personas aproximadamente.

Un total de dos mil 600 policías y militares tomaron el control de la barriada sin encontrar la resistencia armada que esperaban.

“Vencimos. Trajimos la libertad a la población del Alemao”, dijo a periodistas el comandante de la Policía Militar de Río de Janeiro, coronel Mario Sergio Duarte.

Duarte comentó que durante el operativo, los traficantes prefirieron fugarse antes que enfrentar la fuerza del Estado.

El sitio Web del diario brasileño O Globo, reseñó que el comandante de la Policía Militar de Río dijo que “el Complejo Alemán fue tomado por la policía militar, civil y federal, y los hombres de las Fuerzas Armadas”.

Del mismo modo, la versión digital del mencionado diario relató que se decomisaron 10 toneladas de marihuana y se conoció la detención de ocho personas, que trataban de huir.

La coordinadora de las líneas de emergencia, Adriana Núñez, confirmó que el servicio recibió llamadas en donde se denunciaba que los narcos trataban de huir del Complejo por las tuberías bajo tierra.

El tubo subterráneo fue instalado por las obras del Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC), indicó O Globo.

Por su parte, el gobernador de Río, Sergio Cabral, agradeció en entrevista a un canal local los esfuerzos de la policía y militares.

“Tenemos un trabajo que tiene como principal objetivo la recuperación de 30 años de abandono” dijo Cabral.

El operativo, que comenzó el fin de semana pasado, es la respuesta de las autoridades a la ola de violencia iniciada hace una semana por narcotraficantes del Comando Vermelho, que quemaron un centenar de vehículos en distintos barrios de Río de Janeiro y su área metropolitana.

Las acciones dejaron al menos 35 muertos. Hasta ahora no ha habido un balance actualizado de los fallecidos.

El pasado jueves, efectivos del Batallón de Operaciones Especiales de la Policía Militar y de los Fusileros Navales penetraron en Vila Cruzeiro, en la zona norte de Rio de Janeiro, considerado el principal reducto de los traficantes de drogas de esta ciudad.

Esta resulta la mayor operación contra el narcotráfico en Río de Janeiro y cuenta con el respaldo de la población, así como del gobierno federal, por intermedio del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien manifestó que se le dará toda la ayuda que requieran las autoridades locales para acabar con el crimen organizado.