Prensa Latina (PL)

Miles de efectivos de la policía sionista invadieron este domingo una mezquita de beduinos palestinos en el sur de Israel, donde forzaron la salida de los fieles y la derribaron, incidente antecedido por un bombardeo aéreo contra Gaza.

La agresión se produjo este domingo en la ciudad beduina de Rahat, dijeron testigos al relatar que decenas de personas fueron arrestadas mientras rezaban y obligadas a ir hacia las afueras de la localidad hasta que terminara la demolición del recinto religioso.

Un hombre identificado como Yusuf Abu Jamer declaró a una televisión local que la policía israelí utilizó balas de goma y bombas de gas lacrimógeno para dispersar a residentes que protestaron en las calles contra el atropello y la vejación.

Las autoridades de Israel alegaron que la mezquita había sido construida sin la debida autorización y por ello fue reducida a escombros, al igual que ocurrió en julio pasado en Rahat con las casas de cientos de beduinos supuestamente edificadas de forma ilegal.

Entretanto, la televisión local reportó que al menos un palestino resultó herido el sábado cuando aviones israelíes bombardearon túneles en la localidad de Rafah, situada en el sur de la Franja de Gaza y fronteriza con Egipto.

La acción armada coincidió con el sobrevuelo de la ciudad de Khan Younis, la segunda más importante de este enclave, por aviones militares sionistas en un acto con claro propósito intimidatorio.

De acuerdo con datos difundidos en septiembre por el Centro Al-Mezan para los Derechos Humanos, 160 palestinos han muerto en los pasadizos subterráneos de Rafah que sirven para paliar las carencias materiales provocadas por los tres años y medio de bloqueo israelí.

Entre las causas de esas muertes destacaron ataques aéreos israelíes, intoxicación por inhalar humo venenoso esparcido por fuerzas de seguridad egipcia dentro de esos corredores y accidentes por derrumbes mientras cavaban, señaló la entidad.