Patria Grande/Agencias
El portavoz del ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hong Lei, señaló en un comunicado, transmitido por la agencia oficial Xinhua, que “la situación en la Península Coreana es altamente complicada y sensible, y todas las partes implicadas deberían mantenerse en calma y tener moderación”.

Estados Unidos y Corea del Sur decidieron efectuar las maniobras el próximo 28 de noviembre en respuesta al ataque norcoreano a la isla de Yeonpyeong, que causó cuatro muertos (dos de ellos civiles) esta semana.

La zona económica exclusiva de China incluye la mitad oriental del Mar Amarillo, en el que EE.UU. y Corea del Sur van a llevar a cabo las maniobras, aunque en principio no parece que éstas vayan a alejarse de la costa surcoreana, por lo que no deberían entrar en el área que defiende Pekín.

La advertencia es la primera alusión directa de China a las maniobras militares, después de haber adoptado en los últimos días en un tono neutral y sin calificar los incidentes en Yeonpyeong como un “ataque norcoreano”, sino como “un intercambio de artillería” entre las dos Coreas.

El pasado miércoles, el primer ministro chino, Wen Jiabao, declaró desde Moscú que su Gobierno “se opone a provocaciones militares en cualquiera de sus formas” en la Península Coreana, sin señalar a uno u otro país, y pidió a todas las partes “la máxima contención”.

China se opone a la intervención de Estados Unidos en los asuntos correspondientes las diferencias entre las Coreas. El pueblo coreano fue separado por Washington mediante una guerra, en la que China fue aliada de los revolucionarios del Norte.