Matrizur con información de CEPETEL

 

 

 

Alrededor de 9000 trabajadores vienen siendo objeto de despidos y persecución laboral desde hace algunos años por parte de la empresa IBM DE ARGENTINA que, a pesar de haber obtenido ganancias históricas en las ultimas décadas expulsan a cientos de familias hacia la exclusión, desvinculándose de toda responsabilidad social. El 60% de los trabajadores que emplea IBM en Argentina están bajo el régimen de tercerización laboral, denominado por la justicia laboral como un Fraude Laboral ya que emplea a trabajadores de terceras empresas para la tarea normal y habitual que la empresa desarrolla e incluso los trabajadores son transferidos una empresa de servicios eventuales a otra por orden de la misma empresa. Por otra parte los trabajadores reciben ordenes de personal de IBM y desempeñan sus tareas en edificios provistos o al menos requeridos por la empresa Multinacional.

Los trabajadores de IBM contratados bajo el régimen de tercerización – entre cuyas empresas de servicios se encuentran Delta Plus e ISD que forman parte del mismo paquete empresario y Adecco, G&L, Manpower entre otras – tienen un régimen laboral muchas veces diferentes de los empleados “efectivos” lo cual genera que haya empleados de primera y de segunda categoría incluso para efectuar iguales tareas.

El modus operandi de la empresa IBM consiste en contratar mediante empresas eventuales trabajadores bajo esa modalidad durante años (algunos con mas de 10 años de antigüedad), en exceso a lo que la normativa vigente dispone, para luego y solo en algunos casos obligarlos a renunciar para contratarlos en planta de modo “efectivo” haciéndolos postular para la misma tarea que ya venían realizando hasta ese momento mediante la firma de una solicitud de empleo incorporándolos a IBM como trabajadores nuevos sin reconocerles antigüedad.

 

En cuanto a las remuneraciones, la casi totalidad de los trabajadores de IBM Argentina están bajo la figura de “fuera de Convenio” y tanto sus categorías laborales, condiciones de trabajo y niveles salariales son fijados unilateralmente por la empresa y en el mejor de los casos teniendo en cuenta sistemas de evaluación del desempeño laboral que en un momento fue realizado conjuntamente pero en la actualidad solo es completado por los gerentes de los trabajadores sin ninguna participación del trabajador. En cuanto a los antecedentes para la organización sindical en IBM Argentina hasta el año 2009 nunca funcionó un sindicato prevaleciendo la premisa de la empresa de mantener relaciones laborales «sin la presencia de terceras partes», este neologismo de una política antisindical por parte de IBM evitó por mucho tiempo que los sindicatos «ingresen» a la empresa y que los trabajadores intenten agremiarse.

Esta política de la empresa alcanzó para frenar algunos intentos de reclamos salariales colectivos y con las amenazas de despidos y relatando supuestas «purgas sindicales» esto frenaba cualquier reclamo colectivo de parte de los trabajadores.