Felipe Gutierrez
El impresionante aporte de los medios alternativos a las luchas revolucionarias de Latinoamérica es tal vez la más colosal conquista comunicacional de los últimos tiempos producto de la acumulación de saberes, conocimientos, ideas y voluntades de verdaderos combatientes que día a día trabajan para la construcción de una Patria Grande.
La lucha librada contra el Imperio -que aliena a millones de nuestros compatriotas bloqueando su conciencia a través de los medios masivos de comunicación- tienen en internet un arma que adquiere cada vez mayor influencia y que requiere en la actualidad de una concepción comunicacional más acorde al bombardeo mediático selectivo que utilizan los agentes de la maquinaria comunicacional-imperial como estrategia de segmentación de su territorio de ocupación audiovisual en la actual fase de la guerra de 4ta generación.
La importancia de los medios alternativos es de tal magnitud que impacta directamente no solamente en las sociedades de todos los países de la región, sino que además obliga al enemigo a rearmar su estrategia de laboratorio mediático, modificando sus ataques políticos psicológicos sobre la población desarmada que asimila pasiva y cotidianamente las balas tóxicas del capitalismo en su más elevada expresión consumista.
El ataque mediático «a muerte» impuesto al pueblo de la República Bolivariana de Venezuela y al resto de nuestros países nos debe obligar a implementar respuestas comunicacionales específicas en cada territorio radioeléctrico para enfrentar a este monstruo de mil cabezas que arremete día tras día sobre niñas, niños, mujeres y hombres dandole armas a nuestros pueblos para liberarse de la barbarie lanzada por el gobierno de los Estados Unidos.
Repotenciar la batalla comunicacional contra el abominable imperio yanqui es la tarea de la hora y una obligación revolucionaria de todos.