Agencia de Noticias Telam


Buenos Aires.- El Gobierno nacional rendirá hoy un homenaje al libertador José de San Martín, con un acto que se realizará en la localidad correntina de Yapeyú y que será encabezado por el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.

Al cumplirse 160 años del fallecimiento de San Martín, viajarán a Yapeyú, además de Fernández, los ministros de Defensa, Nilda Garré; de Educación, Alberto Sileoni, y el secretario general de la Presidencia, Gustavo López.

Allí serán recibidos  por el gobernador Ricardo Colombi y el intendente Gustavo Adán Gaya, entre otros funcionarios provinciales.

Media hora después, la comitiva visitará las ruinas de la casa natal de San Martín y firmará el libro histórico, y a las 15:00 hora local, asistirá a la Plaza de Armas del Templete Sanmartiniano.

A las 15.30 se proyectará el trailer «El cruce de Los Andes» y a las 16 arrancará el desfile, que se cerrará a las 18 con un recital de la folclorista Teresa Parodi.

En realidad, el programa de actos se inició ayer a las 19.00, con un festival de chamamé, que continuará -entre las 21 y las 23- con un show de Soledad Pastorutti.

El cierre de ayer del homenaje a San Martín ocurrirá poco antes de la medianoche cuando Soledad cante el Himno Nacional Argentino desde el Templete, que será transmitido a todo el país por cadena nacional.

San Martín
El Padre de la Patria argentina, José de San Martín, constituye junto a Simón Bolívar uno de los libertadores de Suramérica frente a la colonización española. A 160 años de su muerte, los pueblos latinoamericanos  lo recuerdan.

Héroe y prócer nacional, cuyas campañas militares fueron decisivas para la independencia, no solo de su país, sino de Chile y Perú, San Martín murió lejos de su tierra, en Boulogne-sur-Mer, Francia, a los 72 años, el 17 de agosto de 1850.

Su activa vida militar y su lucha incansable por la libertad de los pueblos lo llevaron a combatir en disímiles regiones del mundo como España, varias zonas de África, los Pirineos franceses, y el Mediterráneo, hasta que en 1812 regresa a Buenos Aires, donde se le encomendó la creación del Regimiento de Granaderos a Caballo, que hoy lleva su nombre.

Durante ese año instruyó a la tropa en las modernas técnicas de combate que conocía por su extensa actuación europea contra los ejércitos de Napoleón.

Además se ocupó de organizar una sociedad secreta que se denominó la Logia de Lautaro, con el objetivo de trabajar con sistematicidad en la independencia de la América y su felicidad.

Luego, concentrado en la magna obra de liberar a Suramérica del yugo colonial, creó el Ejército de los Andes y liberó a Chile, en las batallas de Maipú y Chacabuco. Tomando bajo su control los barcos chilenos, atacó el centro del poder español en Suramérica, la ciudad de Lima, que declaró su independencia en 1821.