En la elaboración de este expediente aparecen actores políticos venezolanos denunciando ante el Ministerio Público la programación de la Radio Arsenal del 23 de enero. Pero, también, prometiendo elevar ante la embajada colombiana y UNASUR esta denuncia. ¿Qué denuncia? ¿A quien le habla cuando realiza la denuncia? ¿Cuáles son sus interlocutores? Invocar, a la embajada de Colombia, para remitir la información supone entre otros tópicos que la embajada y el gobierno colombiano pueden actuar contra la Radio Arsenal en cuanto las atribuciones especiales y extraterritoriales de la Doctrina de la Guerra Preventiva de los Estados Unidos y la Iniciativa de Seguridad Democrática de Colombia lo establecen taxativamente. Pero, también, las operaciones de militarización (realismo espacial) combinadas (formalismo jurídico) con los usos arbitrarios y selectivos del derecho internacional pretenden fortalecer las bases de un Fascismo Global del Capital. La combinación de ambas Doctrinas de Guerra pretende suspender las garantías de los principios de la soberanía nacional y la autodeterminación de los pueblos. Sobre una justificación de defensa de la seguridad nacional se bombardeo territorio soberano del Ecuador.
La segunda parte de este guión es más simple. Dos canales: Radio Caracas Internacional y Radio Caracol Internacional entrevistan al actor político en cuestión para presentar la primicia. En una puesta en escena sórdida y triste como formando parte de personajes extraviados en el subsuelo de la política latinoamericana. Alineándose con las políticas de restauración del Neoliberalismo Disciplinario. Como aquellos tantos muchos que en la soledad de su reflexión se encuentran ante la escasez argumentativa, la inconsistencia ideológica y en los sueños desvanecidos. Conversos espiritualmente al neoliberalismo claman por la Solución Final. En todo caso, el actor político es un memorable personaje de ficción. Simula una visión pre-programada. No habla sino actúa: se siente como el policía que interroga en el Ministerio de la Verdad de la novela de 1984. Si, como el celebre O`Brien, quien establecía los límites precisos entre la falsedad y la verdad. Dueño de esta última y convencido de la trascendencia de sus actos interpela la realidad. Sustituyendo la realidad con el simulacro. Esta segunda parte no se dirige contra la soberanía sino contra la libertad de pensamiento y expresión. Las homologías que se construyen descalifican de antemano. El objeto de la segunda operación es asociar el marxismo-leninismo y el comunismo con terrorismo. Y dado que estas locuciones forman parte del debate político venezolano criminalizar a sus portadores en tanto terroristas. Este Fascismo Global del Capital establece como principio rector <<ninguna tolerancia contra los enemigos de la libre empresa y la depredación global>>
Epilogo. Esta operación ensayada en la Ave. Universidad, donde esta ubicada la sede del Ministerio Público, contó con el concurso y la anuencia de las empresas de medios de información Radio Caracas Internacional y Radio Caracol Internacional. La tarea, fabricarle la legitimidad a la propaganda de guerra. Construyendo un desplazamiento que transita desde la percepción personal a la percepción social. El modelo expresivo de la información de guerra es impresionar, persuadir y distraer sobre sus objetivos no confesados. El titular de la primera página del diario El Tiempo de Bogotá el 25 de julio de 2010 lo confirma. Quienes aseguran en su portada <<Hasta emisoras de radio tienen las FARC y el ELN en Venezuela>> No hay investigación, sólo existe la condena, a los enemigos jurados del Neoliberalismo Disciplinario. La idea es unificar y fabricar un consenso para justificar las operaciones militares e informativas posteriores. Esta burda operación forma parte de los juegos de guerra de mercenarios de la política. Insistir en el legado común es hoy una de las tareas fundamentales entre dos naciones que comparten afectos e historias, muchas veces tensas y contradictorias, como las existentes entre naciones fronterizas. Romper el juego a los prejuicios es una tarea fundamental. Tratar de construir una unidad en la pluralidad de nuestras manifestaciones es la tarea política de este Siglo XXI.
Fuente: http://www.minci.gob.ve/noticias/1/201263/como_se_fabrican.html