«Hay elementos que resultan altamente preocupantes: los ejercicios militares que surcoreanos y gringos realizan en las aguas del Mar Amarillo; las presiones sobre Irán por atreverse a desarrollar la energía nuclear con fines pacíficos; la movilización de las armadas yanqui e israelí cerca de las costas persas; la violencia en Irak y Afganistán ocupados por el imperio», denunció el mandatario.
En su habitual columna dominical Las líneas de Chávez, también mencionó como otro factor alarmante el bloqueo a Gaza por parte de Israel, con el beneplácito de Washington.
Para el gobernante, mientras las relaciones mundiales se tensan, está ausente una voluntad política real para resolver las crisis.
Chávez subrayó que el gobierno de Barack Obama «está demostrando ser, en las palabras y en los hechos, la segunda administración de Bush (George W.), por seguir la misma línea belicista e igual estrategia de dominación».
Pero si acercamos la mirada a la región, nuestras preocupaciones aumentan alcanzando signos de alarma, sentenció.
El dignatario denunció asimismo las permanentes y falaces acusaciones de organismos de la administración de Obama sobre supuestos nexos de Caracas con el narcotráfico internacional, así como la presencia sorpresiva, y sin explicaciones convincentes, de miles de marines norteamericanos en Costa Rica y los sobrevuelos de aviones de Holanda sobre territorio nacional.
Mencionó además como otros signos de preocupación, los planes de desestabilización violenta revelados tras la captura del terrorista salvadoreño Francisco Chávez Abarca en suelo nacional, la pretensión del Senado chileno de inmiscuirse en el proceso electoral del 26 de septiembre y las declaraciones del saliente gobierno colombiano, el cual insiste en relacionar al país con grupos guerrilleros como las FARC y el ELN.
El estadista comentó que tal actitud de la administración neogranadina lo obligó a anunciar una posible ruptura de relaciones si continúa la locura que se ha apoderado de la Casa de Nariño, siguiendo el guión imperial, enfatizó.
«ÂíVaya panorama! seríamos ingenuos si a esta suma de agresiones no le damos una lectura en conjunto, todo está relacionado. Pienso que estamos delante de una reactualización de la doctrina imperial estadounidense que se enfrenta a los nuevos proyectos de soberanía de nuestra América», indicó.
Tal doctrina, añadió, recibe el suntuoso nombre de Dominación de espectro completo.
Los países que hemos decidido labrar el porvenir con los pueblos como protagonistas de la historia, volvemos a estar en la mira, y por supuesto, Venezuela es el primero de la lista en América del Sur, advirtió.