El más reciente es la presencia de la flota estadounidense, que se dirige hacia el Golfo Pérsico luego de atravesar el Canal de Suez para entrar al mar Rojo el viernes 18 junio.
Esa información fue corroborada por el secretario de Defensa, Robert Gates, y el Departamento de Inteligencia estadounidense.
Según el científico español Alfredo Embid, el día antes de la salida de la flota, Gates «habría hecho sonar tambores de guerra amenazando que Irán podría atacar a Europa con decenas o centenares de misiles según sus informes de inteligencia».
En respuesta, Teherán indicó que sus misiles eran para defensa y no para atacar, pero EEUU ya había difundido la idea contraria.
A raíz de esa incursión, la Guardia Revolucionaria iraní envió importantes refuerzos al mar Caspio según reportó la agencia de noticias UPI (United Press International).
A finales de mayo, tres submarinos con capacidad para disparar misiles con velocidad de crucero a cualquier punto de Irán ya se encontraban en el Golfo.
Desde Israel, los periodistas ya hablan del cerco a Irán por la presencia de bases y tropas estadounidenses en 10 países de la región cerca del país persa.
Ayer, la agencia AFP reportaba la reunión del rey Abdalá de Arabia Saudita con el presidente de EEUU, Barack Obama, en el marco de incrementar la presión sobre Irán.