BBC
La compañía aeronáutica estadounidense Boeing presentó un avión espía a hidrógeno no tripulado que puede volar cuatro días seguidos.
El fabricante del Phantom Eye (Ojo de Fantasma) informó que el aparato puede alcanzar una altitud de 20.000 metros.
El prototipo será enviado al Centro Dryden de Investigación de Vuelos de la agencia espacial estadounidense NASA, con base en California, donde se harán todos los preparativos para su primer vuelo a principios de 2011.
Según Boeing, la aeronave podría hacer «inteligencia y vigilancia constante».
Este producto pertenece a Phantom Works, una subsidiaria del fabricante de aviones dedicada a investigación y desarrollo.
«Volamos el Condor (el anterior avión no tripulado) durante 60 horas en 1989 utilizando combustible normal», dijo Chris Haddox, portavoz de Phantom Works. «Ahora estamos hablando de 96 horas».
Una semana
La empresa explicó en un comunicado de prensa que el Phantom Eye «funciona con 2,3 litros (de combustible) y un motor de cuatro cilindros que produce 150 caballos de fuerza cada uno». Su fuselaje es largo y su envergadura alcanza los 46 metros.
«No está construido para el sigilo, sino para la resistencia», le dijo Haddox a la BBC.
El Ministerio de Defensa del Reino Unido ha mostrado su interés en este tipo de aeronaves de vigilancia con mucha autonomía y que vuelan a gran altitud. Está evaluando varias tecnologías, como la solar, para ver cuál cumple con los requisitos del llamado «Proyecto Scavenger».
La compañía aeronáutica y de defensa Qinetiq está realizando varias pruebas en colaboración con el gobierno británico para desarrollar el avión solar Zephyr.
En relación con el Ojo de Fantasma, un portavoz del ministerio de Defensa comentó que volar durante cuatro días «está muy bien». «Pero estamos considerando un abanico de opciones para nuestros requisitos de reconocimiento constante».
«Una de estas opciones podría ser que vuele durante una semana», agregó.