TeleSur

Tegucigalpa, junio 29 – El Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) en Honduras logró recolectar este lunes más de 600 mil firmas para convocar a una Asamblea Nacional Constituyente que restaure el orden en el Estado y exija el regreso del ex mandatario constitucional de ese país, Manuel Zelaya, derrocado por el golpe de Estado del 28 de junio de 2009 en esa nacion centroamericana.

»Estamos en un proceso de recibir declaraciones soberanas por la constituyente y el retorno de José Manuel Zelaya Rosales(…) Hemos llevado ya y podemos dar la cifra, llevamos más de 600 mil firmas recibidas a nivel nacional y esto es un proyecto gradual, va de cada aldea, cada municipio, cada región del país», afirmó un miembro del FNRP, Rassel Tomé.

Por su parte, Lídice Ortega, miembro de la Organización Feminista en Resistencia Hondureña  señaló durante una entrevista ofrecida a teleSUR que esta iniciativa también es una manera de que se castigue los delitos políticos perpetrados durante el golpe de Estado y se haga justicia en Honduras

Estas declaraciones del movimiento social opuesto al actual Gobierno se realizaron en el marco de las manifestaciones organizadas ante el primer aniversario del golpe de Estado que sacó a Zelaya del poder.

En la ciudad de Tegucigalpa , miles de hondureños congregados por el FNRP bloquearon una importante vía que comunica a la ciudad con el oriente de la nación, luego marchar hasta el centro de la ciudad, coreando consignas como «Sí a la Constituyente», «Viva Mel Zelaya» y «Fuera golpistas».

Entre los manifestantes, que provenía de diferentes partes del territorio, se encontraba la esposa del ex presidente constitucional hondureño, Xiomara Castro de Zelaya, y su hija Hortenzia.

«Pedimos el retorno de Zelaya y la convocatoria a una Asamblea Constituyente», afirmó Cindy Melissa Jirón, una estudiante de medicina de 20 años que asistió a la protesta.

La marcha fue reguardada por decenas de agentes policiales y los alrededores de la Casa Presidencial estuvieron custodiados por efectivos militares y policías armados con escudos y fusiles M-16, así como también bombas lacrimógenas y bastones de madera.

Frente a la fuerte presencia de las fuerzas del orden, Carlos Reyes, miembro del  FNRP, denunció atropellos e intimidación por parte del Ejército hondureño durante la manifestación.

»Hay movilizaciones de militares, ustedes acaban de ver ahorita, acaban de hacer las tomas en donde estos señores están en la parte de atrás, más de 300 con tremendos garrotes que se los dio un empresario (…) Por otro lado, en las distintas carreteras del país hay retenes militares para registrar y parar los buses», indicó Reyes.

Además de la marcha, la Plataforma de Derechos Humanos, conformada por varias organizaciones gubernamentales realizaron el establecimiento formal de la Comisión de la Verdad, conformada por dos ciudadanos hondureños y ocho extranjeros.

Esta comisión se estableció luego de que el presidente sucesor del régimen de facto, Porfirio Lobok, instalara otra similar a principios de mayo pasado con la intención de «aclarar» los hechos del golpe de Estado de junio de 2009.

La Comisión de Lobo surgió de los acuerdos de Tegucigalpa- San José, que fueron suscritos en octubre de 2009 por el sucesor del Gobierno de facto y por el ex presidente de este régimen, Roberto Micheletti.

El coordinador de este comité instalado por Lobo es el ex presidente de Guatemala Eduardo Stein.

Luego del Golpe de Estado contra Zelaya, miles de violaciones a los derechos humanos han ocurrido en el país centroamericano.

En lo que va del año 2010, unos nueve periodistas opuestos al Gobierno han sido asesinados. Igualmente, durante el régimen de Roberto Micheletti, unos 40 miembros de la resistencia golpista  fueron ultimados, cinco jóvenes masacrados en marchas pacíficas y se efectuaron más de tres mil detenciones.