El 58 por ciento de los encuestados considera que los hijos de los inmigrantes ilegales, nacidos en Estados Unidos no deberían otorgarle la ciudadanía de manera automática.
Los sondeos fueron realizados por la firma Rasmussen Reports, a raíz de la idea impulsada por el senador estatal de Arizona, Russell Pearce, quien tiene la voluntad de presentar, a nivel estatal, un proyecto de ley para que se prohíba la entrega de la nacionalidad estadounidense a niños de ilegales.
«Intento promover una iniciativa en Arizona en la que se rechace emitir un certificado de nacimiento que reconozca la ciudadanía a aquellos nacidos de extranjeros ilegales, al menos que uno de los padres sea ciudadano», redactó Pearce en sus misivas.
El contenido de varios de los correos fue publicado por un canal local.
Según las agencias de noticias, en uno de los correos Perace critica a la enmienda 14 de la Constitución de Estados Unidos, que establece el otorgamiento en forma automática de la ciudadanía a los niños nacidos en este país.
La cláusula señala que los ciudadanos estadounidenses son «todas las personas nacidas o naturalizadas en el hecho o la razón de la jurisdicción de Estados Unidos».
El senador manifestó que el hecho de estar sujeto a la jurisdicción territorial, no es un factor determinante para otorgar la ciudadanía.
«Los indoamericanos, a pesar de la obvia ubicación de su nacimiento, no recibieron la ciudadanía estadounidense hasta que les fue conferida por actos congregacionales en 1887 y 1901», insistió.
«La extensa litigación concerniente a los indios americanos, prueba que el consentimiento del gobierno y del individuo es lo que controla la ciudadanía, en vez del lugar de nacimiento», sostuvo el parlamentario.
Entre otros aspectos, la encuesta revela que el 85 por ciento de los votantes se opone a que los extranjeros indocumentados reciban beneficios públicos. Sólo el 9 por ciento está de acuerdo con esta resolución.
Asimismo, el 33 por ciento, apoyan la vigente legislación que establece: si una mujer entre de manera ilegal al país norteamericano y da a luz, el recién nacido es ciudadano automáticamente.
Sólo mil personas fueron entrevistadas a nivel nacional, usadas como muestra general.
La diferencia entre las opiniones es más notable en los partidos políticos, debido a que el 76 por ciento de los republicanos y el 60 por ciento de los votantes independientes favorecen el proyecto impulsado por Pearce.
El 56 por ciento de los demócratas opinan lo contrario, que no es necesario la implementación de la ley. Mientras tanto, el 83 por ciento manifestó su rechazo con el Gobierno federal por no tomar acciones sobre el tema migratorio y solamente el 12 por ciento indicó que los inmigrantes son causas de este problema.
El 67 por ciento de la muestra general considera que los efectivos de la Guardia Nacional deben estar desplegados en la frontera, para prevenir la migración ilegal.
La encuesta se llevó a cabo los dos primeros días de este mes de junio y tiene un porcentaje de error de tres puntos.
El pasado mes de abril, la gobernadora republicana de Arizona, Jan Brewer, promulgó la polémica ley SB1070, antiinmigrante que criminaliza a indocumentados en esa zona de Estados Unidos, pese a las manifestaciones que tuvieron lugar para rechazarla, además de la fuerte crítica del mismo presidente, Barack Obama.