Agencia Venezolana de Noticias (AVN)

AVN.- En casi dos años de implementación, el método cubano de alfabetización “Yo, sí puedo” logró sacar de la oscuridad hasta hoy a más de 500 iletrados de Sevilla, capital de la comunidad autónoma española de Andalucía.

De acuerdo a una nota publicada en el portal del canal Telesur, cerca de 200 nuevos graduados engrosaron esta semana el ejército de sevillanos que ya aprendieron a leer y a escribir mediante la novedosa técnica pedagógica de la isla caribeña, que se aplica por primera vez en Europa.

En un emotivo acto, celebrado en un céntrico hotel de la principal urbe hispalense, los flamantes alfabetizados recogieron el diploma que les acredita haber dejado atrás esa lacra, que en pleno siglo XXI todavía soportan millones de personas en el mundo.

Sólo en Sevilla, sureña ciudad andaluza de unos 704 mil habitantes, viven más de 40 mil iletrados.

Reconocido y premiado por la Unesco, el programa “Yo, sí puedo2 nació en 2003, con el objetivo de implementar un instrumento que lograra una alfabetización rápida, masiva y a bajos costes en las llamadas naciones del Tercer Mundo.

Venezuela fue el primer país en implantarlo y, en apenas dos años de desarrollo, consiguió en 2005 la declaración de Territorio Libre de Analfabetismo, meta que repetirían pocos años después Bolivia (2008), Nicaragua y Ecuador (ambos en 2009).

Este plan de aprendizaje de la mayor de las Antillas se aplica en la actualidad en unos 30 países del planeta, con distintas versiones que se adaptan a cada lugar, como es el caso de España, inédita experiencia en el contexto de las naciones industrializadas.

La usanza demuestra que en un período de dos meses, la persona iletrada termina siendo capaz de expresar sus ideas de forma coherente y por escrito con una caligrafía legible.

Del mismo modo, el sistema favorece la implicación y la participación de la comunidad en los barrios en los que se acomete y la mejora de las condiciones de vida de sus vecinos.

Ejemplo fehaciente de ello es Sevilla, donde el procedimiento, además de explotarse en 14 zonas de la localidad, se extendió hasta un centro penitenciario.

La gala de graduación del Yo, sí puedo en Andalucía estuvo presidida por el primer teniente de alcalde, Antonio Rodrígo, el vicepresidente de la Fundación DeSevilla, Carlos Vázquez, y el cónsul general de La Habana en Sevilla, Ricardo Rodríguez.

La gratitud y solidaridad hacia Cuba marcaron las intervenciones de una noche en la que se enalteció el esfuerzo de los alumnos, verdaderos protagonistas del proyecto, y las personas encargadas de desarrollar esta noble tarea de enseñanza en tierras europeas.