Aoirrea.org / Agencias

La trasnacional taiwanesa Foxconn, que fabrica el iPhone de Apple y otros aparatos tecnológicos de uso en todo el mundo, decidió contratar a 2.000 psiquiatras y consejeros psicológicos para intentar detener la ola de suicidios en las fábricas chinas de la empresa, informó la prensa local.

Los trabajadores de las fábricas de la firma cobran un sueldo base anual de unos 1.750 dólares

Según el diario South China Morning Post, la firma puso en marcha el reclutamiento de psiquiatras en una feria de trabajo de Shenzhen, la ciudad donde trabajan 400.000 de los 700.000 empleados de Foxconn y donde se han producido 10 intentos de suicidio, con ocho fallecimientos. El último suicidio fue el viernes pasado, cuando un empleado de 21 años saltó al vacío desde la azotea de una torre en las instalaciones de la empresa en Shenzhen.

A los nuevos psiquiatras les ofrece un salario anual de entre 25.000 y 75.000 dólares, mientras los trabajadores de las fábricas de la firma cobran un sueldo base anual de unos 1.750 dólares, destacó el diario oficial Global Times.

El reclutamiento masivo de psiquiatras es la última medida tomada por Foxconn, que ya había celebrado en sus empresas de Shenzhen reuniones en grupo para ayuda psicológica e incluso había contratado a monjes para que llevaran a cabo ritos religiosos con el fin de eliminar los «malos espíritus» en la firma.

Duras condiciones de trabajo

Todos los suicidas en la empresa eran jóvenes de menos de 25 años que empezaban a trabajar en el gigante tecnológico, por lo que estos sucesos han desatado el debate sobre las condiciones de trabajo en la compañía y si las nuevas generaciones de chinos, más acomodadas que las anteriores, están preparadas para las duras condiciones de trabajo de las factorías chinas.

Algunas razones personales podrían también estar detrás de la ola de suicidios

Trabajadores de la firma entrevistados por Global Times reconocieron hoy que hay «falta de entendimiento y comunicación entre superiores y trabajadores», y que en los dormitorios los empleados apenas se comunican entre ellos por lo extenuados que terminan la jornada.

No obstante, razones personales podrían también estar detrás de la ola de suicidios, que ha llamado la atención de los diarios nacionales e internacionales.

El último caso, Nan Gang, un trabajador de 21 años que se lanzó por la ventana de su dormitorio el pasado viernes, había tenido dos desengaños amorosos en cuatro meses y contrajo muchas deudas de juego, por lo que recibía amenazas.

La semana pasada la televisión local de Pekín mostró presuntas imágenes de guardias de Foxconn en la sucursal de Pekín golpeando a trabajadores. Estos vídeos no han hecho sino aumentar las críticas a la firma taiwanesa, una rama del conglomerado industrial Hon Hai que también hace encargos a Sony, Amazon, Nintendo y otras multinacionales tecnológicas.