Agencias / Aporrea.org

La gran diferencia en la votación del independiente Antanas Mockus con respecto a su rival, el oficialista Juan Manuel Santos, quien se alzaba con más del 46% escrutadas el 86% de las mesas en las presidenciales de Colombia, provocó decepción y llanto en su sede de campaña.

Mockus, candidato del Partido Verde, obtenía apenas 21%, cuando las encuestas le colocaban en empate técnico con Santos hasta hace una semana.

Con los ojos llorosos, Esperanza Salgado, de 48 años y quien se trasladó a la sede de los verdes desde una barriada de Bogotá, se declaró «sorprendida por los resultados» y dijo que «la culpa es de la maquinaria del (presidente Alvaro) Uribe».

Sin embargo, declaró que tiene «esperanzas de que en la segunda vuelta se pueda revertir» esa tendencia.

Si ningún aspirante obtiene más del 50% de los votos válidos será necesario un balotaje en segunda vuelta, el 20 de junio.

Jorge Millán, estudiante universitario, consideró «decepcionante para Colombia que no triunfe una alternativa decente como la de Mockus», pero prometió «trabajar el doble para ganar la segunda vuelta».

Hasta el atardecer, sólo había simpatizantes en la sede de los verdes, sin que hubiese llegado aún alguno de los dirigentes.

Santos, del Partido Social Unión Nacional (La U, derecha), ha prometido dar continuidad al gobierno de Uribe, del cual fue ministro de la Defensa