Bajo el lema Contra la Europa del capital, la guerra y sus crisis, España acogerá desde este viernes la Cumbre de los Pueblos «Enlazando Alternativas IV», que reivindicará el papel de los movimientos sociales frente al capitalismo.
El foro congregará hasta el próximo martes en Madrid a unos cuatro mil activistas de unas 400 organizaciones políticas, sociales, sindicales, juveniles y feministas procedentes de Latinoamérica y del llamado Viejo Continente.
La cita, que sesionará casi en simultáneo a la VI Cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea-América Latina y el Caribe (UE-ALC), pondrá el acento en los principales problemas que aquejan a los dos continentes involucrados.
Queremos poner en común ideas y construir solidaridad desde abajo para enlazar políticas alternativas y crear un camino indisoluble hacia la justicia, la sostenibilidad y la igualdad, subrayan sus organizadores.
Durante el encuentro, con sede en la Universidad Complutense de Madrid, se planteará un rotundo rechazo al modelo neoliberal, en especial a los tratados comerciales impulsados por Europa con varias naciones latinoamericanas.
En más de un centenar de seminarios, debates, mesas redondas y actividades culturales programadas para la ocasión, la Cumbre de los Pueblos denunciará, además, las políticas financieras y desarrollistas y el militarismo en ambos continentes.
Como centro de la reunión sesionará un Tribunal Permanente de los Pueblos (TPP) para juzgar a las empresas transnacionales europeas, establecidas tanto en el llamado Tercer Mundo como en los propios países de origen de ese capital.
Decenas de agrupaciones presentaron ya sus cargos ante el TPP y numerosos testigos del saqueo formularon sus acusaciones contra multinacionales como Repsol-YPF, Unión Fenosa, BBVA, Telefónica o Pfizer, por sólo citar a algunas.
Los promotores de la contracumbre alertaron que su celebración se produce bajo los efectos de una grave crisis financiera, económica, climática, energética, alimentaria y social a nivel planetario.
Esta debacle está provocando, tanto en el Viejo Continente como en Latinoamérica, más desempleo y precariedad laboral, más pobreza y exclusión social y más violencia y destrucción medioambiental, remarcaron.
Además de la situación en Honduras tras el golpe de Estado de junio pasado, el foro se convertirá en otro espacio de denuncia contra la más reciente campaña mediática desatada contra Cuba.
Los asistentes aprovecharán esta tribuna para exigir, por enésima vez, el cese del bloqueo estadounidense impuesto al pueblo cubano y de la injerencista Posición Común de la UE, que condiciona las relaciones con la mayor de las Antillas.