El país que los supo retener durante tantos años, España, ahora atraviesa una de sus peores crisis laborales y muchos argentinos vuelven a mirar con entusiasmo su país natal.
El flujo de inmigrantes argentinos hacia España se ha estancado y las cifras retroceden significativamente cambiando una tendencia que se registraba ininterrumpidamente al menos desde 1995″´, explicó el especialista Walter Actis, del Instituto Nacional de Estadística español.
En plena crisis de empleo, con cifras de desocupación de 4,6 millones de personas los migrantes se encuentran entre los grupos de población más afectados.
Entre 2008 y 2009 unos 30.000 argentinos perdieron su empleo en España. Los más afectados son los más jóvenes, los que tenían ocupaciones de tipo manual y los inmigrantes durante el período más reciente ya que un 77% de los desempleados del periodo del «corralito» eran trabajadores manuales.
«Es un fenómeno muy positivo la reducción continua desde enero de 2005 de los argentinos «sin papeles», que carecen de permisos de residencia y trabajo. En esa fecha, alcanzaron las 93.000 personas mientras los que tenían permisos aumentaron de 56.193 hasta 103.171 en la actualidad», preciso Walter Actis.