Patria Grande

Ciudad de México, abril 22 – Como parte de una muy criticada decisión del Gobierno de ese país, a partir del próximo 1 de mayo México exigirá que los extranjeros que deseen visitar el país posean visa expedida por Estados Unidos.

De acuerdo con el presidente de México, Felipe Calderón, la medida se tomó para «favorecer el turismo» en la nación, pero diversos sectores de la sociedad mexicana consideran que la iniciativa representan una actitud servil ante Estados Unidos.

La corresponsal de teleSUR en México, Laura Simón, explicó que cualquiera que consiga el documento expedido por el Gobierno de Estados Unidos, podrá permanecer hasta seis meses en territorio mexicano.

Al respecto, Verónica Reyes, ciudadana mexicana, fue entrevistada por Simón y manifestó su rechazo a la medida del Gobierno de Calderón, por considerar que la soberanía de México, en cuanto a política migratoria, dependerá de Estados Unidos.

«Muy mal, ¿Cómo que ahora Estados Unidos va a poder mandar en México? ¿De qué estamos hablando?», expresó Reyes.

Por su parte, Jeniffer Zepeda, también ciudadana mexicana, dijo antes las cámaras de teleSUR que, con esta medida, Calderón está recibiendo órdenes del Gobierno estadounidense, por lo que México ahora no tendrá el control de su política en el área de la migración.

«Lamentablemente este Gobierno que tenemos está permitiendo recibir órdenes de los Estados Unidos, porque así lo consideramos. Ya no es que México decidirá qué es lo que se hace», indicó Zepeda.

La periodista Simón también detalló que los ciudadanos de 135 países y regiones deben solicitar visa ante las autoridades mexicanas para ingresar al país, pero el tramite se les dispensa si ya cuentan con la visa estadounidense.

El politólogo de la Universidad Autónoma Metropolitana mexicana, Gerardo Ávalos, también fue entrevistado por Simón y sostuvo que la medida anunciada por Calderón violenta la reciprocidad diplomática y representa una subordinación de México a Estados Unidos.

«Para atraer más turismo se violenta la reciprocidad diplomática. ¿Todo lo hacemos por dinero, pero dónde queda la dignidad nacional, dónde queda la historia, nuestra historia? es una sobordinación hacia Estados Unidos impresionante», resaltó Ávalos.

La medida fue anunciada por Calderón luego de que el senado local de la región estadounidense de Arizona, fronteriza con México, aprobó una Ley que criminaliza la migración indocumentada y la castiga con cárcel.