Los inmigrantes fueron arrestados apenas pisaron suelo norteamericano por carecer de visas y llevan más de dos meses de confinamiento sin recibir atención especializada, refiere el diario The New York Times.
Muchos de los haitianos presos estaban en el aeropuerto de Puerto Príncipe en busca de comida, seguridad o asistencia médica cuando los aviones del Ejército norteamericano comenzaron a evacuar personal después del terremoto.
El sistema de inmigración se negó a aceptar la solicitud de familiares de los presos que desean hacerse cargo de ellos, o el pedido de un psicoterapeuta nacional que se ofreció a darles asistencia en el reclusorio, acota.
Un portavoz del gobierno reconoció al diario que los 30 haitianos tienen abierto un expediente, y otros 35 llegados con posterioridad están detenidos en distintas cárceles alrededor del país en espera de ser procesados.