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La denuncia por presunto «incumplimiento de los deberes de funcionario público y abuso de autoridad» fue presentada ante el juez federal Daniel Rafecas por los abogados Antonio y Darío Liurgo.
En su escrito, los letrados también pidieron que se someta a Cobos a «una pericia psiquiátrica y psicológica», al considerar que «no parece descabellado verificar la existencia de elementos constitutivos de su aparato psíquico que generen algún grado de inimputabilidad».
Los abogados acusaron a Cobos de un delito que castiga de un mes a dos años de prisión al funcionario que dicte una resolución contraria a la Constitución o a las leyes.
La denuncia penal se conoció horas después de que el Gobierno de Cristina Fernández renovara sus críticas contra el vicepresidente, quien está enfrentado con el sector gobernante desde mediados de 2008.
Aunque afirmó que el Gobierno argentino no impulsará el juicio político de Cobos, el jefe del Gabinete, Aníbal Fernández, dijo hoy a emisoras de radio que «cualquier ciudadano» puede denunciarlo por incumplimiento de los deberes de funcionario público.
«Cobos está defraudando a la voluntad popular y debería renunciar», declaró por su parte Agustín Rossi, titular en la Cámara de Diputados del bloque del Frente para la Victoria.
El nuevo enfrentamiento entre el Gobierno y el vicepresidente se desató el jueves pasado cuando el Senado, que preside Cobos, aprobó una reforma que prevé ampliar el reparto de lo recaudado por el impuesto a las transferencias bancarias, creado en 2001 y conocido como «impuesto al cheque».
El Senado dio luz verde a la iniciativa por «mayoría simple» (35 votos a 33), pero el Gobierno calificó de «inválida» la votación al argumentar que este proyecto, según establece la Constitución, necesitaba «mayoría absoluta», es decir la mitad más uno de los miembros de la cámara, lo que suponen 37 votos.
Cristina Fernández acusó a Cobos de «violar la Constitución» y el vicepresidente respondió que la mandataria «no respeta el juego democrático», además de indicar que había actuado conforme al reglamento de la cámara alta.
Al insistir en sus críticas a Cobos, el diputado Rossi envió hoy un mensaje al oficialista Eduardo Fellner, titular de la Cámara de Diputados, para que esta cámara «no dé curso» al proyecto aprobado por el Senado.
Tanto la Unión Cívica Radical como la Coalición Cívica, segunda y tercera fuerzas parlamentarias argentinas, respaldaron a Cobos al indicar que el gobierno pretende «sacarle del medio».
El Gobierno y Cobos rompieron relaciones en julio de 2008 cuando con su voto de desempate en el Senado el vicepresidente impidió la aprobación de una ley por la que el Ejecutivo se proponía aplicar un sistema de impuestos a la exportación de granos que era rechazado por el sector agrícola.
Desde entonces, el oficialismo ha acusado de «traidor» al vicepresidente y le ha pedido que renuncie al considerarle «el jefe de la oposición».