Masacre de Trelew. fue el asesinato, en 1972, de 16 miembros de grupos de izquierda, presos en el penal de Rawson, capturados tras un intento de fuga y ametrallados luego por marinos dirigidos por el capitán de corbeta Luis Emilio Sosa.
La información fue difundida por el Secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, quien precisó que Bravo fue «puesto a disposición de la justicia de Miami» y «a través de la Cancillería, la justicia argentina solicitó su extradición».
Su detención había sido solicitada por el Juez Federal de Rawson, Hugo Sastre, quien ya elevó a juicio la causa por el resto de los imputados. El marino es acusado de ser uno de los fusiladores de la masacre.
Duhalde señaló que Bravo había salido del país en 1977, radicándose luego en los Estados Unidos, donde poseía una firma que lleva sus iniciales, RGB Group Inc., que provee de servicios médicos a fuerzas militares y de seguridad norteamericanas, y era dueño de propiedades en el Estado de Florida.
A partir de su detención se inicia el proceso de extradición, sobre el cual el secretario expresó que el Estado argentino no escatimará en esfuerzos para que termine satisfactoriamente y ponga fin a la impunidad de la que Bravo goza desde hace casi 38 años.