En una entrevista con Radio América, en la que no dio detalles de los encuentros, Lobo aseguró que se reunió con los mandatarios Álvaro Colom, de Guatemala; Mauricio Funes, de El Salvador; Oscar Arias, de Costa Rica; Ricardo Martinelli, de Panamá, y que «todos quieren ayudar» a la solución de la crisis hondureña.
«Aquí a nivel centroamericano tenemos nuestros amigos, con los cuales hemos tenido contacto prácticamente casi con todos, excepto con el presidente Ortega de Nicaragua, no hemos tenido ningún contacto; debo decir que yo hice una llamada, porque yo no quiero que nadie diga que nosotros no hemos buscado la forma de conciliar y que haya paz», agregó.
«Nosotros no estamos en una posición, y lo he reiterado claramente, de confrontar con nadie; sí, yo quiero ser enfático: que no vamos a permitir que nadie nos imponga a nosotros cualquier tipo de imposición política sobre cómo debemos de actuar», señaló.
Por otra parte, en una entrevista publicada hoy por el diario La Prensa, Lobo reiteró, como dijo el sábado a su regreso de unas vacaciones en Estados Unidos, que «todos» los presidentes han sido invitados a su investidura.
Ante la pregunta sobre si se incluye a Chávez y Ortega, respondió: «Toditos están. Si no quieren venir pues ni modo, pero vamos a invitarlos a todos».
Lobo también se mostró a favor de que el Congreso Nacional ratifique la decisión tomada por el presidente de facto, Roberto Micheletti, de retirarse de la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA), a la que el hoy derrocado Manuel Zelaya adhirió el país en 2008.
«Honduras debe ponerle fin a cualquier convenio que signifique compromiso político. Siento que no debemos sumisión a nadie, ningún tipo de tratado que incluya compromiso de tipo más allá de lo que es la buena relación cordial; esas alianzas de tipo político siento que no ayudan, ser parte de bloques… eso no es correcto», manifestó.
En sus declaraciones a Radio América, Lobo rechazó ser «derechista» y subrayó que su partido reformó su «plataforma ideológica» para ubicarse «en un humanismo cristiano».
«No somos de izquierda ni de derecha, somos dentro del marco de la doctrina socialcristiana, o sea en el centro», expresó, y consideró que «lo ideal en la economía es la economía social de mercado» y en «lo político el mejor sistema que se conoce es la democracia».
Recordó que «el socialismo como sistema prácticamente se derrumbó» y que «el capitalismo ha estado en crisis (…) y por eso ubicamos al partido en el centro humanista cristiano».