«La resuelta voluntad de Gaza fue victoriosa. La resistencia, que defendió su tierra con honor, no fue quebrada», declaró un alto miembro de Hamas, Ahmed Bahar, en el acto de inauguración de un monumento a los muertos en el conflicto.
Hace un año que Israel lanzó una ofensiva aérea y terrestre contra el pueblo palestino, con el fin, según Israel de frenar los disparos de cohetes palestinos contra su territorio.
Israel utilizó armas prohibidas en su ataque contra el pueblo palestino, como fósforo blanco, que han sido rechazado por organismos internacionales como la Cruz Roja Internacional y los grupos de defensa de los derechos humanos, quienes han exigido la prohibición de proyectiles con este material por provocar quemaduras severas, problemas respiratorios y lesiones mortales, según organizaciones de derechos humanos.
Asimismo, se estima que las celebraciones por la victoria que obtuvo Hamas contra Israel deben durar 22 días, el mismo tiempo que duró la agresión. Es decir, la conmemoración será desde el 27 de diciembre de 2009 al 18 de enero de 2010.
La conmemoración de la operación Plomo Fundido, es un recordatorio de las duras consecuencias del ataque israelí.
«El objetivo de este acontecimiento es mostrar esta guerra y sus masacres, que son sin precedentes, ante los ojos del mundo entero. Esto para que los jefes de esta guerra sionista sean juzgados», manifestó el portavoz del ministerio del Interior en Gaza, Ihab al-Ghussein.
El bombardeo israelí contra la Franja de Gaza comenzó un 27 de diciembre, con ataques aéreos simultáneos provocando al menos 225 muertos en un día, pasando a ser considerada una de las jornadas más sangrientas desde que inició el conflicto entre ambas naciones fronterizas.
Durante la agresión a Gaza las tropas israelíes mataron a mil 450 palestinos, según un balance publicado por los servicios de auxilio palestinos, el documento incluye entre las víctimas mortales a 439 menores de 16 años y 127 mujeres.
«Fueron días sombríos. Había cadáveres en cada calle, en cada callejuela», recordó el jefe de los servicios de emergencia de Gaza, el doctor Muawiya Hasanein, quien perdió 16 socorristas durante los combates.
En un informe publicado en septiembre, la misión de investigación del juez Richard Goldstone, nombrada por el Comité de Derechos Humanos de la ONU, acusó a Israel, así como a los grupos armados palestinos, de «crímenes de guerra», e incluso de «crímenes contra la humanidad».
El costo de la agresión
A un año de la agresión, que dejó al menos mil 400 palestinos muertos, miles de personas perdieron sus viviendas y siguen sin sus hogares ni tiendas de campañas, porque el bloqueo israelí impide la entrada de materiales de construcción.
Marwan al Atar, victimas del bombardeo israelí y quien ha subsistido en una tienda de campaña en Beit lahia, en el norte de Gaza, indicó que tuvo que dejar su carpa por las fuertes lluvias que azotaron la región.
«Dejé la tienda de campaña hace 45 días, cuando el agua de la lluvia y el viento la destrozaron. Mis hijas han contraído enfermedades cutáneas y están en estado grave», aseguró.
Al Atar manifestó que su situación era tan desesperada que prefirió regresar a los escombros de su antiguo hogar antes que permanecer en su carpa, del campamento del barrio de Al Atatra, levantado hace un año por organizaciones humanitarias internacionales para los que perdieron su casa en los bombardeos.
«Ahora vivo con mis 10 hijos en mi casa destruida. Pedí dinero a un familiar para reconstruir una habitación y un cuarto de baño. Nadie se preocupa de enviarnos comida o dinero. Estamos olvidados», lamentó Al Atar.
La situación no es mucho mejor para quienes siguen en el campamento de Al Atatra, donde niños descalzos juegan en un insalubre charco de lluvia, aparentemente ajenos a su desgracia.
Por su parte, la adolescente Yamila al Habash, perdió sus dos piernas cuando un misil israelí impactó en su casa al este de Gaza y mató a su hermana menor y su prima con las que jugaba.
La joven, entonces de 14 años, descubrió la tragedia cuando despertó en el hospital y descubrió que no tenía sus dos piernas.
Un año después, Yamila va a clase andando con el apoyo de muletas y gracias a unas extremidades ortopédicas que recibió en Eslovenia hace unos meses.
Los residentes del campamento todavía esperan 4 mil 481 millones de dólares prometidos por más de setenta países en marzo pasado en Egipto para la reconstrucción de Gaza tras la operación Plomo Fundido, que se inició hace un año.
A parte de las victimas mortales, en casi un mes del ataque israelí, cuatro mil 100 edificios fueron destruidos por completo y otros 17 mil dañados, según datos estadísticos del Ministerio de Gobierno de Hamas.
Los habitantes de Gaza no han podido importar materiales de construcción a causa del bloqueo israelí, iniciado en 2006 y por la construcción del enorme muro que no deja manera de comunicación.
También Egipto está construyendo un muro en su frontera con Gaza con el fin de bloquear los túneles que han constituido la única línea de supervivencia para la población de Gaza, al ser la vía para la entrada de los alimentos y bienes de consumo que aquella precisa.
Advertencia de las Naciones Unidas
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, advirtió este domingo que «no hay ni puede haber una solución militar para el conflicto israelo-palestino» y exhortó a lograr un acuerdo sobre la base de los dos Estados.
Moon expresó su preocupación por el poco progreso que llevan ambas naciones y también lamentó el poco avance realizado en la ejecución de la resolución 1860 del Consejo de Seguridad sobre la materia.
En este sentido, afirmó que son insuficientes los suministros que llegan a Gaza debido al bloqueo impuesto por Israel y aseguró que la actividad económica y la reconstrucción están paralizadas.
El secretario general de la ONU, subrayó que le son negados los derechos humanos básicos al pueblo palestino.
En sus declaraciones, Moon reclamó a Israel el cese de su inaceptable y contraproducente bloqueo y que permita el impulso de las labores de reconstrucción y pidió a la organización palestina Hamas finalizar los actos violentos.
Hace tres días, el relator especial de la ONU para los territorios palestinos ocupados, Richard Falk, llamó a los aliados norteamericanos y europeos de Israel a ejercer sanciones económicas sobre Tel Aviv para que levante el bloqueo contra Gaza.
Por su parte, el coordinador especial de la ONU para el proceso de paz en el Medio Oriente, Robert Serry, instó a la comunidad internacional a trabajar por la superación de la crisis de confianza y las contradicciones que impiden la reanudación de las negociaciones.
«Estamos en una carrera contra el tiempo para vencer las contradicciones existentes y la crisis de confianza entre las partes en conflicto y poder avanzar con decisión», dijo el funcionario al hablar ante el Consejo de Seguridad.