Estela Carlotto consideró «una decisión muy clara y justa» el fallo de los jueces de la Sala 2, Hugo Gurruchaga y Alberto Criscuolo, «después que Bergesio perdiera tanto tiempo inútilmente» para establecer la identidad de los jóvenes «lo antes posible y de acuerdo con el pedido que había hecho en agosto pasado la Corte Suprema de Justicia».
La causa que investiga la presunta apropiación ilegal de Felipe y Marcela durante la última dictadura militar, es llevada adelante por Bergesio desde hace siete años, período en el que la querella de Abuelas de Plaza de Mayo cuestionó su actuación por demorar los recurrentes pedidos de extracción de ADN a veinte familias que podrían tener lazos sanguíneos con los jóvenes.
Desde noviembre, rige la ley que habilita a los jueces a obtener muestras de ADN para identificar a hijos de desaparecidos mediante métodos alternativos a la extracción de sangre.
«Esta orden es para cumplirla inmediatamente aunque sea apelada por la familia Noble», interpretó la titular de Abuelas.