Luego de difundir estas estadísticas de las violaciones de derechos humanos cometidas contra los palestinos, la organización, que cumple 20 años este mismo domingo, dice que no puede celebrar nada sino «conmemorar, porque no hay nada que celebrar».
Las últimas dos décadas han estado marcadas por los enfrentamientos de la primera intifada (1987-1993), de la segunda intifada que comenzó en 2001 y de la ofensiva devastadora «Plomo fundido» de Israel contra la franja de Gaza.
«Una perspectiva de veinte años deja a uno con el corazón encogido, especialmente por la continuada violación del derecho a la vida de los palestinos e israelíes que resulta del conflicto», asegura en un comunicado la directora de la ONG, Jessica Montell.
A pesar de la dureza de los datos, Montell considera que «se pueden percibir algunos logros en materia de derechos humanos. Por ejemplo, hace veinte años miles de palestinos eran sistemáticamente y rutinariamente torturados durante las investigaciones y, gracias a los esfuerzos de la comunidad defensora de los derechos humanos, en la que se incluye Betselem, las torturas han cesado».
Además, la ONG reporta la destrucción de cuatro mil 300 casas palestinas en territorios ocupados como castigo de las autoridades israelíes o por no contar con permisos administrativos, junto a otras seis mil 240 en distintas operaciones militares en Gaza.
Betselem también denuncia que, desde su nacimiento en 1989, el número de colonos judíos que han establecido su residencia en los Territorios Ocupados ha pasado de 69 mil 800 a cerca de 420 mil, con 300 mil instalados en Cisjordania y cerca de 120 mil en Jerusalén Oriental, lo que constituye uno de los principales escollos para alcanzar un acuerdo de paz.
Israel ha fomentado la política de construir asentamientos en Cisjordania, aduciendo razones religiosas y de seguridad.
En la actualidad, el 59 por ciento de Cisjordania está oficialmente bajo el control civil y policial de Israel.