Telesur
Los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Bolivia, Evo Morales, firmaron este sábado una serie de acuerdos de cooperación financiera y energética, entre los que destaca la construcción de una carretera que unirá a sus países, algo que el mandatario brasileño calificó de importante pues traerá consigo el incremento del comercio a ambos lados de la frontera y de la inversión extranjera en el país andino, lo que le abrirá un «nuevo ciclo de desarrollo».

«Estamos celebrando un acuerdo que va a acortar distancias (…) lo que hoy se hace en 12 horas va a a hacerse en apenas cuatro horas cuando la carretera esté lista», aseguró Lula quien arribó la mañana de este sábado a la zona de el Chapare, al centro del país andino, en una visita que terminará este mismo sábado.

El acuerdo al que se refiere Lula es un convenio para la construcción de una carretera pavimentada de 332 kilómetros que articulará el centro surandino con el noreste amazónico de Bolivia, y permitirá la comunicación entre los Andes, donde se concentra la mayor parte de la población boliviana, y la Amazonia.

El presidente brasileño ha comprometido un fondo de 330 millones de dólares para la construcción de la vía que canalizará la producción agropecuaria de ambos departamentos inconexos entre sí.

El monto que asignará Brasil para la obra, cubre el 70 por ciento de los 417 millones de dólares presupuestados para la construcción de la carretera, mientras que Bolivia aportará los 87 millones de dólares restantes, que serán financiados por las prefecturas de Beni y Cochabamba y por el gobierno nacional.

A la constructora brasileña OAS se le ha concesionado la ejecución de la obra.

En su intervención, el mandatario suramericano también destacó que este tipo de tratados contribuyen al proceso de integración latinoamericano, pues en la actualidad existe una generación de gobernantes convencidos de que «la única solución de nuestros países es la integración suramericana, la integración latinoamericana».

Recordó que ya quedó atrás la época en la que los países latinoamericanos miraban hacia Estados Unidos (EE.UU.) o Europa esperando que estas potencias trajeran la solución a los problemas.

«Todos nosotros pensábamos que los ricos de Europa y que los ricos del norte (EE.UU.) iban a resolver nuestros problemas y nos quedábamos dándonos las espaldas entre nosotros (…) Parecíamos un grupo de amigos que no confiábamos en nosotros mismos y todos nos quedábamos esperando que EE.UU. resolviese nuestros problemas, que Europa resolviese nuestros problemas», dijo.

Exigió una vez más que la comunidad internacional condene el retroceso político surgido en Honduras tras el golpe de Estado e insistió en que el presiente legítimo de ese país suramericano, Manuel Zelaya, debe ser restituido en su cargo.

«Debemos rechazar todo acto de fuerza, debemos condenar el retroceso político en Honduras y exigir el retorno inmediato de presidente Zelaya a sus labores constitucionales», enfatizó.

En otra parte de su discurso, el mandatario invitado destacó la regularización de más de 250 mil bolivianos en Brasil luego de sesionar la Ley de Amnistía el pasado mes de junio que ofrece los derechos de los ciudadanos extranjeros en situación irregular.

«Nosotros lo estamos haciendo diferente de los países ricos (…) el año pasado cuando la crisis económica los países ricos le echaron la culpa a los inmigrantes y comenzaron a sacar leyes para atacar a los pobres» expresó el primer mandatario brasileño.

Lula también dijo que considera que los problemas económicos son responsabiladad de las clases pudientes, no de los pobres. «Estoy seguro que la los brasileños irregulares que están en la frontera entre Bolivia y Brasil, también serán tratados con cariño por parte del Gobierno boliviano».

De su anfitrión y colega dijo que «Evo ha sido un héroe por la lucha de la unión latinoamericana».

«Querido Evo, tu comenzaste una nueva era, Bolivia nunca será la misma, es posible avanzar y ahora que conquistaron la dignidad están aprendiendo el valor de la libertad y nunca más retrocederán».

Al finalizar su discurso, Lula dijo que el próximo 28 de este mes, la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) tendrá una reunión en Bariloche, donde se demostrará que Suramérica «está construyendo una democracia y prosperidad para que reine la paz en el sur».

Otros acuerdos

Lula Da Silva informó que su gobierno instalará un centro de profesionales en Bolivia, «para formar a niñas y niños para el futuro profesional».

«Estamos comprometidos para instalar un centro profesional y capacitar a los niñas y niñas para que puedan ingresar a un campo de trabajo con mejores sueldos y poder así ayudar a sus familaires» dijo Lula.

Como ejemplo del éxito de estos centros de enseñanza, Lula citó el que fue instalado por su país en Paraguay, que ya ha formado a 10 mil jóvenes técnicos industriales, según detalló.

Otro acuerdo firmado entre Brasilia y La Paz es uno para la investigación científica y desarrollo tecnológico del Salar de Uyuni, ubicado en el sureño departamento de Potosí, donde está la mitad de la reserva mundial de litio, metal que se usa para fabricar baterías de carros eléctricos.