En entrevista exclusiva para Telesur, Zelaya reveló que este jueves y como el siguiente paso en su lucha, se trasladará a la fronteriza localidad de Estelí, en Nicaragua, porque «la idea es cruzar». Explicó que se acercará a las localidades de Ocotal y Somotillo, al noroeste de Nicaragua, adonde llamó a los hondureños a acercarse para reunirse con ellos y saludarlos.
Acuerdo de San José ha fracasado
En cuanto a la lectura del Acuerdo de San José, presentado este miércoles por su homólogo costarricense, Óscar Arias, en el marco de una mediación emprendida para intentar solventar la crisis hondureña, Zelaya dijo que: «ha finalizado la mediación y el acuerdo ha fracasado. El derecho de volver a Honduras no me lo pueden negar, mi familia tiene centurias de trabajar en Honduras y además tengo un mandato del pueblo que nadie me lo puede negar», añadió.
Con respecto al rechazo de la delegación de Micheletti, dijo que «hoy salieron con una posición absurda». Durante más de 10 días de mediación, «los únicos que cedimos fuimos nosotros. Los golpistas no retrocedieron ni un centímetro y están insultando al mundo».
Solicita apoyo de organismos internacionales
Zelaya también llamó este miércoles a la Organización de la Naciones Unidas (ONU), a la Organización de Estados Americanos (OEA) y a los organismos internacionales a recrudecer las medidas contra el gobierno golpista en el país centroamericano. El mandatario solicitó a “los organismos internacionales y multilaterales, a los países de la ONU, de la OEA, que recrudezcan y arrecien las medidas para poner un ejemplo, para que esto no haga retroceder a la humanidad, aunque ya le hizo un daño a Honduras”. Indicó:
“Hay sanciones económicas y diplomáticas, tienen aislados a ese regimen dictatorial, pero sin embargo no rectifican y mantienen su férrea oposición a respetar el derecho, la democracia y el pueblo”, manifestó Zelaya.
Recordó que la propia Constitución hondureña avala el derecho del pueblo a la insurrección cuando se asume el poder por la fuerza. C
itó el artículo 3 de la Carta Magna de Honduras donde se asevera “que el pueblo tiene el derecho a la insurrección cuando alguien asume el poder por la fuerza”.
Zelaya además explicó que “todos los actos de un gobierno que asume el poder por la fuerza son nulos totalmente, como lo que están haciendo los organismos de justicia y lo que hace el gobierno de facto”.
Zelaya recordó una vez más cuando fue sacado del país, mientras expresó que «me siento expatriado y sacado a la fuerza. Esto no lo merezco es una injusticia lo que hacen con el pueblo que me aprecia».
Con respecto a las declaraciones del gobierno de facto sobre una polarización en Honduras, Zelaya defendió que ésta se da después del golpe de Estado. «Creo que hay muchos que hablan de democracia, pero no la practican. Cuando se disiente de algo en la democracia hay que entenderla como una solución pacífica» ante los conflictos.
«Agradezco lo que ha hecho la comunidad internacional las manifestaciones del mundo entero (…) Quiero reconocer el esfuerzo de mi familia que ha estado sufriendo, me imagino el sufrimiento de mi gente», manifestó.