Prensa Web YVKE (texto), VTV


Con todas las expectativas que van creciendo en torno a la llegada de Manuel Zelaya (Mel) a Honduras, el sociólogo Miguel Ángel Contreras, el politólogo Alberto Arangibel y la documentalista Lilian Blasser, hacen una revisión sobre el paralelismo existente entre el golpe de Venezuela en el 2002 y este golpe a Mel en 2009.

Entre alguna de las mentiras que ha intentado sembrarse desde los medios de la derecha, se dijo que el secuestro del equipo de Telesur no había sido tal, la cadena RCR habría dicho, que los militares simplemente estaban «protegiendo» a esos periodistas, porque la «turba» pro Mel era «peligrosa» para los periodistas.

La similitud de lo acontecido en Honduras no sólo se reduce a lo que fue el secuestro del presidente, el nombramiento de nuevas autoridades y la persecución a los afectos a Mel, además de la constante transmisión de comiquitas y el mensaje de “todo está en calma”, algunos nombres parecieran hacer eco, como lo son: Vásquez Velasque, vs Velasco, Romero vs. Romeo, en comentario de Lilian Blasser.

Por su parte, Arangibel indica que el conflicto no es para nada casual, además que lo que está en juego es un modelo de sociedad y la cristalización de la justicia social. La estrategia aplicada por los golpistas no puede verse como un hecho aislado, “la respuesta internacional no está referida al padecimiento de ese pueblo”, agregó Arangibel.

Miguel Contreras expresó que lo que sucede en Honduras es paralelo a otras situaciones del resto del continente, “se está viendo una emergencia de una primavera política” dijo el sociólogo. Según Contreras, el continente reclama un cambio del contrato social, de los sistemas políticos por los que nos regimos, esta demanda es un rasgo distintivo del despertar de nuestros pueblos.