TeleSUR

El presidente de Paraguay, Fernando Lugo, en su discurso inaugural de la trigésima séptima cumbre del Mercado Común del SUR (Mercosur) que se realiza en su país, condenó de forma categórica el golpe de Estado contra el Gobierno del presidente Manuel Zelaya e indicó que «Honduras es una herida que sangra en la democracia regional».

Lugo recordó que «como presidencia pro témpore (del bloque) nos hemos manifestado enérgicamente el mismo domingo del golpe en defensa del mandato constitucional de Manuel Zelaya».

Con respecto a la actuación de la Organización de Estados Americanos (OEA), ante la situación hondureña, dijo, «encontramos una OEA que supo recoger el clamor regional y aprobar una conjunto de resoluciones» con las que «ese golpe no servirá de precedente, ni quedará impune».

En referencia a las labores del Mercosur manifestó que «cuando asumimos la presidencia, dijimos que queríamos que en este semestre el Mercosur adquiriera el rostro de su gente», hecho que se evidenció según Lugo con la Cumbre de los Pueblos del Sur que se realizó el jueves, como una reunión alternativa, encabezada por movimientos sociales y que ayudó a fortalecer los debates.

«Mecanismos como la cumbre social, tienen que institucionalizarse y constitucionalizarse en el Mercosur», agregó.

«El Mercosur está llamado a responder las demandas sociales», por lo que «hemos de darle impulso a la declaración sociolaboral».

Informó que el bloque, por medio de sus pueblos y gobiernos, «consiguieron algunos avances», entre los cuales citó la conclusión del reglamento del fondo de la agricultura familiar del Mercosur».

La citada ley, «tiene como objetivo financiar programas y proyectos», para «un sector que produce alimentos y empleo».

«Hemos avanzado en cuanto al relacionamiento externo», con la unión aduanera de África, la unión europera, entre otros, según informó el presidente Lugo.

«Como bloque hemos defendido a nivel internacional que los países desarrollados no cayeron el proteccionismo como forma de enfrentar la crisis» pero reconoció que en algunos momentos, países del bloque si aplicaron tal practica.

Argumentó que en el Mercosur «No hemos conseguido avanzar satisfactoriamente porque al mismo tiempo es imprescindible fortalecer las instituciones del Mercosur».

Ante ello, recomendó que «no es momento de retroceder frente a los desafíos, sino de profundizar y de redoblar las propuestas», en un mundo donde la única salida «es la participación en bloques regionales».

«Nuestros pueblos quieren que continuemos en las senda de la participación», insistió.