Javier Monagas Maita   
“(EE.UU. reconoce su ayuda a la represión del movimiento Mapuche)”

“ señalan que la inteligencia norteamericana «se encuentra monitoreado las actividades de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM)».

“En el informe aseguran que la organización mapuche se estaría organizando y que ha demostrado «una utilización más profesional de las armas y sus tácticas».

La voluntad de los pueblos originarios del continente llamado América, por defender sus derechos ancestrales pisoteados desde aquel día en que la bota invasora Europea se posó en estas tierras.  Renace con un ímpetu inusitado, debido a las corrientes de pensamiento y reconocimiento de su condición de poseedores legítimos de las mismas y a la necesidad de rompimiento de las cadenas opresivas del capitalismo explotador.

En el sur,  “la leyenda de Martin Fierro”, habla de las masacres y persecuciones en contra de los aborígenes mal nombrados “Indios”. En el norte, la demonización de los guerreros autóctonos por defenderse de los arrebatos de sus posesiones y vidas, y que luego fueron convertidos en negocios lúgubres mediante las películas de Hollywood.  Dan clara evidencia de la maldad de espíritu y corazón de una especie, que aunque se hacia llamar humana, ve oportunidad de comercio hasta en la muerte.

Todo el despojo cometido en contra de esas poblaciones inocentes, tiene continuación centenas de años después. Los métodos de acoso y crímenes poseen una gama de  aplicaciones tan diferentes en la practica, como parecidas en los efectos.  El asesinato y tortura de cientos de aborígenes en la Amazonia Peruana de manera descarada y cobarde por parte de las fuerzas gubernamentales a la orden del genocida Alan García, como las fuerzas represivas al servicio de Michelle Bachellet en Chile y del gobierno Argentino contra los mapuches, que aunque no destaquen en los medios periodísticos internacionales, también está sucediendo. No es secreto para nadie, las inmensas cantidades de territorio de los Aborígenes Mapuches, que les han sido arrebatadas para vendérselas luego a transnacionales como Benetton y multimillonarios como Bill Gate, por millones de hectáreas en la Patagonia, por malditos dólares sin valor real. La guerra actual entre los productores explotadores Argentinos en contra del gobierno, por poder disponer de productos extraídos de las tierras riquísimas,  robadas a los aborígenes a sangre y fuego, hablan de cómo existió y sigue sucediendo en el presente, una política de persecución, exterminio y despojo por parte de unos malnacidos infelices, que desprecian, odian y temen la condición de propietarios legítimos de los aborígenes del continente de todo el territorio, antes de su llegada.

En la nueva fase de ataque a los hermanos aborígenes del continente, hasta los servicios de inteligencia se están involucrando.  No se trata solo de los servicios secreto y no tan secretos gringos, si no del servicio del Sionismo Asesino del MOSSAD, y los cuerpos de inteligencia Ingles, Francés etc.  Las riquezas habidas en esos territorios, los hacen más apetecibles. Ya no se trata de minas de oro  o diamante,  ahora se trata de agua, biodiversidad, metales estratégicos como Uranio, Plutonio y otros de igual valor estratégico.  En sus interés por explotar las tierras; los depredadores, asesinos capitalistas, acaban con la fauna, la flora. Diariamente dejan al planeta sin cuantiosas fuentes generadoras de oxigeno. Esa es la razón también por la cual impulsan regímenes de gobiernos complacientes y serviles,  y por la cual atacan a los que les son adversos y favorables  a los pueblos.

La conciencia colectiva internacional de reconocimiento de los derechos de los pueblos Aborígenes, el deber social y político de apoyarlos en el rescate de sus hábitats naturales; las exigencias por que se sancionen los crímenes del pasado y los del presente en contra de cualquier población del planeta, por las fuerzas diabólicas capitalistas y sus amos, sin importar de que país sean gobernantes, tal como el caso entre otros de George w Bush, Dick Cheney etc.

La solidaridad y apoyo con Bolivia, Ecuador, los aborígenes de Colombia, México. En definitiva con todos los pueblos del mundo, es un deber y una obligación de todo aquel que se precie de ser humano y defensor de la verdadera libertad,  más allá de la retorica.

javierdelvallemonagas@gmail.com