«No dudamos que nuestras autoridades, que tomaron posesión el primero de junio, van a investigar la denuncia», declaró el miércoles en rueda de prensa el ministro de Gobernación, Humberto Centeno. Chávez y Evo Morales cancelaron a última hora sus asistencias a la toma de posesión del presidente salvadoreño Mauricio Funes después de que los servicios de inteligencia habrían descubierto un plan de asesinato en su contra.
Centeno dijo que no tiene «detalles» del caso, pero señaló que no le parecía «extraño, y lo digo a título personal, que el presidente Chávez y su inteligencia venezolana hayan detectado lo que él ha denunciado».
Chávez había planeado asistir a la toma de posesión de Funes el lunes en El Salvador, pero dijo que canceló su viaje por un presunto complot y acusó a organismos de inteligencia de Estados Unidos y el anticastrista Luis Posada Carriles, de estar de detrás del plan. Agregó que los servicios de inteligencia venezolanos tenían «información muy precisa» sobre que se planeaba lanzar uno o varios cohetes al avión de Cubana de Aviación en el que tenía programado viajar a San Salvador.
«Centroamérica es un espacio bien complejo, operan organizaciones criminales diversas, entre esas el narcotráfico y organizaciones criminales dedicadas a truncar procesos, asesinar dirigentes», manifestó El Aissami.